La festividad de la Virgen del Carmen reunió desde primera hora a un numeroso público en Formentera. Los actos comenzaron por la mañana, con la disputa de diversas competiciones deportivas. Al mediodía, a la una, se ofició la tradicional misa en los porches de la Casa del Mar, que congregó a una multitud de feligreses, pescadores y curiosos.
A la hora de la comida se organizaron dos grupos: el de jubilados, que se reunió en un restaurante, y el de los marineros en activo, que comieron junto a la Casa del Mar. Por la tarde las fiestas continuaron con varios torneos de juegos, hasta que, a las siete, comenzó la procesión terrestre desde la Cofradía hasta un navío, donde se embarcó la imagen de la Virgen. La travesía abarcó todo el puerto y llegó hasta las cercanías de la isla de Espalmador, momento en el cual volvieron a la Savina todos los barcos.