Más del ochenta por ciento de la plantilla de educación y sanidad pública de las Pitiüses secundó ayer la convocatoria de huelga de funcionarios y empleados públicos, según datos de los sindicatos. Estos dos sectores fueron los «estrella» de la huelga, ya que la incidencia en otros servicios públicos como Correos, Inem o Agencia Tributaria fue muy inferior, por debajo de un 20 por ciento de media. Por su parte, la Delegación del Gobierno en Balears realizó un seguimiento paralelo de la huelga que, según sus cálculos, ha tenido una incidencia aproximada del 13'75 por ciento en los servicios periféricos de Balears. Por su parte, el Govern balear ha estimado que el 9 por ciento de su plantilla secundó la huelga.
Como complemento a los paros y con el propósito de exigir un aumento salarial por encima del 2 por ciento que propone el Estado y oponerse a la movilidad forzosa, medio millar de personas participaron en la manifestación que partió a las 18'30 horas de ayer de Vara de Rey para terminar en la Dirección Insular de la Administración del Estado, donde leyeron un manifiesto con las exigencias que han desencadenado la protesta.
Los manifestantes, apoyados por representantes de partidos políticos (ERC, IU y PSOE) cortaron uno de los carriles de la Avenida de Santa Eulària durante el recorrido, entonado consignas como «Gobierno central, subida salarial» o «¿España va bien? Una mierda para el PP».
En Formentera, las consecuencias de la convocatoria se hicieron notar en el centro de salud, en el ayuntamiento y en los colegios, donde el seguimiento fue masivo. Alrededor de las doce del mediodía una manifestación de profesores partió del colegio Mestre Lluís Andreu a la que se sumó un grupo de funcionarios. La marcha finalizó en el IES Marc Ferrer.