La directora general de Ordenación Turística del Govern balear, Josefina Casals, fue tajante al afirmar ayer en Formentera que «sólo podrán tener un distintivo de calidad aquellos establecimientos que posean una oferta turística claramente diferenciada». Este distintivo será otorgado por el Institut Balear de Qualitat Turística (IBQT) y, para ello, los empresarios se «autoexaminarán para ver si alcanzan los niveles de calidad mínimos para obtenerlo», dijo Casals, señalando posteriormente que será válido tanto para hostales, como hoteles, apartamentos o cualquier tipo de establecimiento turístico, siempre y cuando cumplan unos requisitos que establecerá el IBQT de acuerdo con los propios hoteleros.
Josefina Casals también dejó patente que este sello o marca «no depende del nivel de ocupación del establecimiento sino de la calidad del mismo», y apuntó que, con toda seguridad, los distintivos o sellos específicos podrán empezar a otorgarse a finales de la temporada turística. Los empresarios del sector hotelero de Formentera se mostraron «satisfechos» con la presentación del que tuvo lugar ayer en el Ayuntamiento de Formentera, en la que Casals estuvo acompañada por José Antonio Franco, como representante de Desarrollo e Investigación Turística (DIT), empresa adjudicataria del concurso para gestionar IBQT; Josep Marí Ribas, conseller de Turisme insular; Santiago Ferrer, conseller para los asuntos de Formentera; representantes del Consistorio; del Patronat Municipal de Turisme, así como una nutrida representación de empresarios del sector.
El representante de la empresa adjudicataria advirtió ayer que el modelo de sol y playa «es fácilmente imitable» por otros destinos y que «no se debe competir bajando precios en detrimento de la calidad» sino apostando «por la organización de la oferta en función de la calidad, la profesionalización y los criterios de sostenibilidad».