Los miembros del Grup d'Estudis de sa Naturalesa (GEN) consideran que la documentación presentada en el proyecto de acondicionamiento de la playa de s'Arenal (Sant Antoni) «no justifica» el vertido de 60.000 metros cúbicos de arena en una franja de litoral de 800 metros de largo. Además, los ecologistas no creen razonable que ese vertido obedezca a la necesidad de responder al incremento de las actividades turísticas en la bahía de Portmany.
De igual manera, alegan que es injustificable la dimensión que se quiere dar a esa playa, que tendrá una anchura mínima de 45 metros y máxima de 72 metros: «Es desmesurada», subrayan desde el GEN.
Los ecologistas también atacan la justificación, por parte de la Dirección General de Costas, redactora del proyecto, de que es necesaria esa anchura para «dotar de estabilidad a la playa», ya que en realidad esa necesidad está ligada a «la superficie que se desea ofrecer, tal como se reconoce en el proyecto».
Más grave califican el hecho de que en el documento se admita que el sector sur de s'Arenal tendrá poca estabilidad y que, probablemente, requerirá aportaciones adicionales de arena, más frecuentes que en el resto de la playa. En este sentido, en las alegaciones presentadas por el GEN a la regeneración se advierte de que «no es admisible el desarrollo de un proyecto que no es sostenible».