«Me voy a casar con una perla ibicenca», explicó el novio, el conocido productor y guionista de televisión Germán Àlvarez, a su llegada a la iglesia de Sant Miquel. Àlvarez, acompañado de su hermana y madrina de boda, Mercedes, acudió vestido de chaqué en un elegante Daimler granate y beige, muy tranquilo, y con una amplia sonrisa.
Los momentos de espera de la llegada de la novia, que se retrasó poco más de media hora sobre el horario previsto, sirvieron para que el novio saludase a todos los invitados, unas 150 personas, entre las que se encontraban los actores Pepe Sancho, María Kosti y Valentín Paredes, los presentadores de televisión Juan Imedio, Jennifer Rope, Teresa Viejo y su marido y Goyo González y su acompañante, Sara García.
Tita Planells llegó a la iglesia en un carro de ceremonias ibicenco acompañada de su padre y padrino de bodas, Antonio Planells. Con un sencillo y elegante vestido diseñado por Rosa Clará en tono marfil y pequeños toques de encaje, Tita Planells apareció ante sus familiares e invitados con un rostro radiante escondido bajo un elegante velo. Aplausos y gritos de «¡Guapa!», fueron la antesala de la entrada en la iglesia en la que miembros el la Colla de Sant Miquel de Balansat recibieron a los novios.
El restaurante de El Divino fue el lugar en el que se desarrolló el convite del enlace de Tita Planells y Germán Àlvarez, que finalizó con una fiesta en Pacha hasta altas horas de la madrugada.
Los novios, que debido a la apretada agenda de ensayos de Tita no podrán disfrutar de momento de una luna de miel, se dirigieron a Formentera para disfrutar de sus primeras horas de matrimonio antes de volver a incorporarse a la rutina laboral de Madrid.