«No podría haber ido mejor; ha sido un éxito total». Esta optimista conclusión es la que realizaba ayer el portavoz de la Asociación de Talleres Independientes de Eivissa, Michel Mousset, tras hacer balance de los tres días del I Saló de Vehicles d'Ocasió 2001, en el recinto ferial. Durante los tres días de feria han pasado por el recinto entre 7.000 y 8.000 personas según los cálculos de la organización. La afluencia ha sido constante aunque las mayores concentraciones se produjeron el sábado y el domingo por la tarde.
Prueba del éxito de esta primera convocatoria es no sólo que todos los expositores han manifestado su intención de repetir sino que el volumen de negocio ha sido muy alto ya que se han vendido o comprometido cerca de un centenar de vehículos. Mousset, sin embargo, más que por el éxito de ventas se mostraba satisfecho porque este evento «acerca el vendedor al cliente y contribuye a contrarrestar la mala imagen del sector» que ha generado la venta pirata. Este tipo de eventos «contribuyen a crear confianza», asevera Mousset que está dispuesto a repetir la experiencia en 2002.
Aunque el esquema de este año se utilizará el que viene Mousset avanzó que ampliarán el espacio de exposición y que habrá vehículos a precios más reducidos junto con otros de gama superior que fueron mayoría en esta edición. La única queja significativa de los expositores que han participado ha sido la limpieza del recinto, ya que en la encuesta que se realiza tras este tipo de eventos el cincuenta por ciento de los expositores la ha calificado como «mala». El resto de servicios ha recibido calificaciones mejores, sobre todo la organización, la seguridad y la iluminación.
Los gestores de la cita han remarcado su agradecimiento al personal técnico del recinto, a los monitores del circuito para niños, al organizador de la muestra de vehículos antiguos, a la asociación Raif y a las marcas patrocinadoras su contribución a esta feria.