El Govern podrá aprobar a partir del mes de mayo una modificación de crédito con previsión de ingresos para comenzar a gastar el dinero de la ecotasa. Con un simple trámite administrativo, que no necesita ser aprobado ni por el Consell de Govern ni por el Parlament, el Ejecutivo pretende aprovechar este mismo año la recaudación que se obtenga a través del impuesto turístico que comenzará a cobrarse a partir del 1 de mayo y que deberá ser liquidado por los hoteleros a Hisenda entre el 1 y el 20 de septiembre. En concreto, el Govern ha calculado que recaudará este año unos 30 millones de euros (unos 5.000 millones de pesetas) gracias a la ecotasa.
Es decir, dos terceras partes de la recaudación prevista para todo el año. No obstante, el Ejecutivo reconoce que el montante total de los ingresos puede variar sustancialmente en función del sistema que elijan los hoteleros para pagar el impuesto. En caso de que los empresarios opten por la estimación directa, la recaudación será mayor. Si los hoteleros eligen el sistema de módulos, la previsión es que el pago sea un 35 por ciento inferior. La modificación de crédito consistiría en dotar económicamente el Fondo de Rehabilitación de Espacios Turísticos, que depende de la Conselleria de Turisme, y que fue creado por el Govern para gestionar el dinero de la ecotasa a principios de legislatura.
Aunque los hoteleros presenten recursos judiciales y no paguen la ecotasa, el Ejecutivo podrá utilizar la hipotética recaudación que obtenga gracias al impuesto turístico. De hecho, la presentación de un aval bancario por parte de los hoteleros no será, ni mucho menos, un obstáculo para que el Ejecutivo pueda comenzar a gastar el montante la recaudación. Desde el punto de vista presupuestario, el Govern dispondrá de los ingresos del impuesto turístico este mismo año. De hecho, el Ejecutivo tiene previsto convocar en los próximos días a la comisión interdepartamental que determinará las primeras inversiones que deben realizarse con el dinero de la ecotasa. Esta comisión, que estaba pendiente de un posible acuerdo entre el Govern y los touroperadores ante un posible aplazamiento de la ecotasa, está condicionada a los acuerdos políticos adoptados por el Pacte de Progrés, que ha llegado a un acuerdo para destinar la mayor parte de la recaudación a proyectos medioambientales vinculados al sector turístico.
Entre algunos de los objetivos del Ejecutivo destaca la adquisición de la antigua cárcel de ses Illetes en Calvià, que pudo convertirse en una residencia de autoridades la pasada legislatura. El Govern ya ha firmado una opción de reserva para poder adquirir el edificio a sus actuales propietarios. A partir de ahora, el gabinete autonómico debe decidir en un plazo máximo de dos meses si adquiere la antigua prisión por un precio que no ha trascendido. Mientras tanto, el Govern ha mantenido contactos durante los últimos días con asesores fiscales de Balears para informales del procedimiento que deben seguir sus clientes para pagar la ecotasa. El Ejecutivo cree que, al margen de las grandes cadenas hoteleras, la mayor parte de los empresarios turísticos no solicitarán avales a entidades bancarias para no tener que pagar el impuesto a partir de septiembre.
No obstante, la patronal turística sostiene que la mayor parte de los hoteleros presentarán avales y recurrirán judicialmente el impuesto. Fuentes del sector turístico señalaron a este periódico que ya han comenzado los contactos con entidades bancarias de las Islas para formalizar avales bancarios con unos intereses prácticamente simbólicos.
IFTO teme las reacciones de los turistas ante la
ecotasa
La Federación Internacional de Tour Operadores (IFTO) ha remitido
una carta al presidente de Balears en la que le advierte que la
aplicación de la ecotasa podrá provocar «reacciones incontrolables»
entre los turistas y un empeoramiento en la «ya precaria situación
de las reservas». En este escrito, fechado el pasado 25 de marzo y
firmado por Alan Flook, los mayoristas alertan, asimismo, del «daño
incalculable» que puede causar en la imagen de Balears como destino
turístico la decisión de no retrasar o cancelar el impuesto
turístico. En la misiva, Flook insta al jefe del Ejecutivo isleño,
Francesc Antich, a explicar «el mecanismo administrativo que van a
implementar en destino en relación con la posible devolución de las
cantidades pagadas por los turistas en caso que el Constitucional
anule el tributo».