Eivissa cuenta desde ayer con un Centro Insular de Protección Animal, en el que además de atenderse a perros y demás mascotas se acogerá todo tipo de fauna, desde aves a reptiles, como una tortuga que ya mora en uno de los habitáculos. El centro, inaugurado ayer por el alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, y la presidenta del Consell, Pilar Costa, ha sido construido donde antes estaba situada la perrera, pero a diferencia de aquella está limpio, saneado y dispone de mucho más espacio.
Ahora hay 26 celdas para los perros abandonados, cuando antes se hacinaban en un par, a excepción de los animales considerados peligrosos. Además hay otras 14 jaulas móviles cuyo número puede ser ampliado. La diferencia con la instalación previa es tal que la concejala de Sanidad, Cristina Ferrer, impulsora de este proyecto, advierte de que «se ha cambiado la filosofía; antes era una perrera, pero ahora es un centro de recuperación». Ferrer asegura que se respetará escrupulosamente la legalidad y que los animales estarán bien atendidos, incluso los fines de semana. El centro dispone de una enfermería para curas inmediatas e incluso de boxes de recuperación.
También se ha construido un aula de educación ambiental para concienciar a los jóvenes, y cuenta con un «volador», lugar donde las aves podrán recuperarse. Este último espacio está dividido en tres partes, es amplio y está protegido por brezo para dar sombra y que así se sientan tranquilas. También hay cubetas para recoger tortugas marinas, y las jaulas para perros incorporan un «bebedero chupete» por el que se autoadministran el agua.
La instalación tiene una depuradora con sistema terciario que recupera hasta el último litro utilizado, que se empleará en el lavado del suelo y jaulas. La reutilización será tal que no existe salida de aguas residuales, lo que lo convierte en un circuito cerrado.