El alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, reconoce que el Ayuntamiento de Eivissa retiró el cañizo y vertió escombros en la parte de ses Feixes próxima a la plaza de toros para dotar la zona con un aparcamiento. «Se hizo para realizar el aparcamiento. Era una zona muy peligrosa, que se había incendiado varias veces. Había una gasolinera muy cerca», aseguró ayer Tarrés.
La Conselleria de Medi Ambient del Govern tiene abierto un expediente administrativo para depurar responsabilidades por la desecación de la zona. Según el director general de Recursos Hídricos del Govern, Antonio Rodríguez, sólo se puede realizar esta actuación, con la Ley de Aguas en mano, en dos casos: si sanidad emite un informe por la insalubridad de la zona o si el Consell de Govern declara el interés general. «No se ha dado ninguno de los dos supuestos», dijo el miércoles en Eivissa Antonio Rodríguez.
El Govern ha solicitado al Ayuntamiento una relación de los propietarios de la zona para preguntarles por qué se desecó y se instaló un aparcamiento en esta zona de ses Feixes.
Tarrés dice que ya está un poco «harto» de la polémica de ses Feixes. «Qué denuncien lo que quieran. Nosotros actuaremos como creemos que tenemos actuar y estoy seguro que nosotros, en cuatro años, habremos avanzado más que ellos en 50».
La Conselleria de Medi Ambient avisó hace dos meses por carta al Ayuntamiento que no puede asfaltar el aparcamiento, con capacidad para 1.000 vehículos, tal y como está previsto. «El Ayuntamiento sabrá cuáles son las consecuencias del incumplimiento de una ley», subrayó también en Eivissa la propia consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló.