El Consell considera una pérdida de tiempo que el PSOE encargue por su cuenta la redacción de un proyecto alternativo a la ampliación de la carretera de Sant Antoni. La consellera insular de Carreteras, Stella Matutes, asegura que es «muy raro» que el PSOE dé este paso, «saliéndose de lo que marca el convenio de carreteras».
Matutes no entiende por qué se duplican esfuerzos cuando los dos partidos están de acuerdo en el desdoblamiento (doblar el número de carriles) de la vía. Lo lógico, según Matutes, es trabajar sobre el proyecto realizado por los técnicos del Govern. La consellera asegura que el PSOE se comprometió a interceder ante el Ministerio de Fomento para que apruebe el proyecto aunque éste no se ciña a la normativa y, eso sí, sea igual de seguro. «Pero eso [encargar otro proyecto por su cuenta] es otra cosa que no nos habían dicho», dijo
No obstante, Matutes insiste otra vez que está dispuesta a aceptar toda propuesta consensuada que suponga una mejora de la carretera, aunque recalca que «lo importante es no retrasar la solución porque no estamos en condiciones para hacerlo». Para Matutes la elaboración de un nuevo proyecto supone «partir de cero», por lo que reitera la importancia de «trabajar sobre los estudios ya realizados». La consellera tampoco ve muy claro quién va a financiar este nuevo proyecto y qué va a decir al respecto la Conselleria d'Obres Públiques, que es quién tiene que redactarlo: «No sé si lo respaldará».
El secretario general del PSOE, Xico Tarrés, puntualiza que el partido no ha encargado un proyecto definitivo de la carretera, sino «un estudio de todas las alternativas posibles en base a la normativa». El PSOE ha puesto el asunto en manos de técnicos particulares. «Queremos saber qué se puede hacer en una carretera, y no en una autovía. Nosotros queremos opinar sobre lo que queremos con fundamento», aclara el secretario general de los socialistas. Los técnicos, según Tarrés, van a realizar «los planos del modelo de carretera en el que nosotros creemos».
Insiste en que no se trata de «un proyecto de 40 millones, ni mucho menos, sino de un estudio que no pasará de los tres millones [de pesetas]», que financiará el partido.