El conseller balear de Comerç, Indústria i Energia, Josep Juan Cardona, y el alcalde de Sant Antoni, José Sala, firmaron ayer un convenio para impulsar en el municipio diferentes medidas encaminadas al ahorro y a la racionalización energéticas en el alumbrado del municipio y los edificios públicos. El acuerdo contempla dos medidas principales: la elaboración de un plan director de alumbrado urbano con la colaboración de la Direcció General d'Energia y la realización de cinco estudios de viabilidad en edificios de gestión o titularidad municipal con la voluntad de incorporar medidas de eficiencia e introducir energías renovables. En concreto, estas auditorías se llevarán a cabo en el campo de fútbol, el polideportivo con la piscina municipal, la futura terminal de autobuses, una escuela municipal y las instalaciones geriátricas. De todas estas infraestructuras, el primer edil destacó la residencia asistida que se ubicará en el Camí de Benimussa y la estación de autocares porque son dos instalaciones todavía en proyecto, que gracias a esta iniciativa, podrán incorporar desde el principio estas medidas de eficiencia energética.
Cardona destacó entre los beneficios de la actuación la reducción de la contaminación lumínica y, por tanto, la mejora del paisaje nocturno, y la disminución de emisiones contaminantes a la atmósfera. Asimismo, señaló que en el caso del alumbrado público se calcula que la promoción de medidas eficientes permitirá un ahorro en la factura eléctrica que oscilará entre «el 20 y el 50 por ciento». El conseller calcula que el plazo de ejecución del programa será de aproximadamente «unos dos meses».
El convenio sellado ayer se enmarca dentro de los objetivos del primer Plan de Eficiencia Energética de las Illes Balears que ha puesto en marcha recientemente el Govern y que se plantea como objetivo principal contribuir a la reducción de la intensidad energética en un uno por ciento anual.
Cardona explicó que estas actuaciones se llevarán a cabo en todos los municipios de las Balears que lo soliciten y recordó que en Formentera ya se llevó a cabo un convenio similar que contemplaba la realización de un plan de eficiencia energética para el alumbrado público con la intención de luchar contra la contaminación lumínica. Esta medida supuso un ahorro energético de «un 60 por ciento», según el conseller. El Govern también realizó auditorías energéticas en 17 establecimientos hoteleros de la Pitiusa menor.