El Parlament balear aprobó ayer, por unanimidad pero con reproches cruzados entre el PP y el PSIB-PSOE sobre la responsabilidad del deficiente estado de los Juzgados de Eivissa y Formentera, instar al Ministerio de Justicia a construir una nueva sede para esta institución, como solicitaba el grupo popular.
Todos los grupos coincidieron en destacar el estado de abandono de la sede actual de los Juzgados emplazados en Eivissa, que se vio agravado en diciembre por una inundación de aguas fecales procedentes del alcantarillado público, que afectó a las dependencias ocupadas por el archivo y al Instituto de Medicina Forense. Esta situación, de grave riesgo para la salubridad de los trabajadores, ha motivado que los empleados de esta institución se hayan negado a bajar al archivo, entre otras circunstancias que afectan al funcionamiento de la institución, explicó el diputado del PP Miquel Jerez. El parlamentario del PP atribuyó esta situación al «olvido» al que están sometidos los Juzgados por parte de los actuales responsables del Ministerio de Justicia. Esta afirmación fue contestada por la diputada socialista Pilar Costa, quien señaló que la situación de precariedad data de hace quince años, durante los cuales se han sucedido dos gobiernos del PP en la Administración central sin que la situación haya mejorado. Costa, además, acusó al Consell de estar «boicoteando» la construcción de la nueva sede de los Juzgados, para lo que el Gobierno central destinó cuatro millones de euros en 2005, en la primera partida destinada por un Ejecutivo estatal a este fin, según expuso la diputada. Jerez negó este hecho y sostuvo que si la Comisión Insular de Urbanismo no ha podido analizar dicho proyecto se debe a que recibió la documentación necesaria «hace tres días».