El edil señaló que esos expedientes de sanción se han remitido a la Dirección General de Consumo y que las sanciones que se les impondrán pueden oscilar entre los 1.500 y 60.000 euros «porque se consideran infracciones graves».
«Es importante que todo el mundo se dé cuenta de que cada cual tiene su licencia y su horario y que cada vez que se pasa está perjudicando a otros», aseguró José Ramon Serra, para añadir después: «No creo que la gente que ama Sant Antoni esté en contra de las medidas que estamos emprendiendo, porque van encaminadas a mejorar el turismo, a hacer que haya más freno al desenfreno, que cada uno ocupe la parcela que le corresponde». A ese respecto, precisó que, de la misma forma que el Ayuntamiento está cerrando establecimientos de ocio nocturno por el incumplimiento de la normativa, hará lo correspondiente con los demás locales que tampoco cumplan con las ordenanzas.
A este respecto, cabe recordar que las asociaciones de comerciantes y de vecinos de Sant Antoni han solicitado esta semana la creación de una mesa de diálogo para mejorar la imagen del municipio, cuestion que, según el edil de Turismo, «es algo para hablarlo de cara a los meses de invierno». José Ramon Serra valoró la actitud «constructiva» del colectivo vecinal, que, por su parte, ha decidido dar un voto de confianza al concejal porque «es la primera vez que el Ayuntamiento demuestra una voluntad real de solucionar los problemas, afirman los vecinos.