El Gobierno central ha incluido una amplia franja de la costa de Eivissa como zona apta para la instalación de parques eólicos marinos, según consta en la propuesta definitiva realizada por el Ministerio de Industria Turismo y Comercio. Los espacios más perjudicados son Sant Antoni y la zona norte de la isla, donde se podrán levantar áreas eólicas muy cerca de la costa.
Desde el Ministerio ya habían elaborado un mapa previo en el que se incluía la zona norte, aunque ahora se ha ampliado a Sant Antoni. Al parecer, desde el Ministerio sostienen que la presencia del gasoducto marino, que tiene su entrada en Cala Gració, posibilita también el hecho de colocar áreas eólicas en este espacio.
El Govern balear presentó alegaciones cuando apareció el primer borrador, en diciembre, aunque esta objeciones no han sido tenidas en cuenta por el Gobierno, que además ha introducido la zona de Sant Antoni en su mapa definitivo.
Hace un par de meses, el conseller de Medi Ambient, Miquel Àngel Grimalt, calificó de precipitada la decisión del Gobierno porque consideraba que el mar balear debe estar libre de este tipo de instalaciones. También recordó que la UE trabaja en la declaración de nuevos Lugares de Interés Comunitario (LIC) marinos y podría incluir aguas baleares, además de que las islas son lugares turísticos que se podrían ver afectados por el impacto visual.
Eivissa es una de las islas más afectadas de Balears, aunque también se incluyen otros puntos en el sur de Menorca y el sudeste de Mallorca. Pese a ello, y según consta en la documentación del Ministerio, el Consell d'Eivissa no hizo ninguna alegación en contra.
El informe de sostenibilidad ambiental de este proyecto sí que recoge las objeciones que puso el Govern balear a la instalación de parques eólicos marinos en la costa. En concreto, cita que la Conselleria de Turisme entendía que estos elementos suponen «un precio desmesurado» a pagar por el avance de las energías limpias. «Se considera que el impacto visual y paisajístico que pudieran ocasionar estas instalaciones podría perjudicar gravemente el entorno», cita el informe. También la Conselleria de Pesca destaca la presencia de posidonia. Desde el Ministerio de Medio Ambiente alegan que no habrá ninguna área eólica hasta 2010. Además, cuando las empresas interesadas soliciten permiso se volverán a hacer estudios de impacto ambiental, aunque esto no convence al Govern.