a procesión del Jueves Santo en Sant Ferran fue, cuando menos, un tanto anómala en su decurso ya que sólo desfiló la cofradía del Santo Cristo del Cementerio procedente de Eivissa, con sus nazarenos y banda de música, y una cofradía infantil que portaban la imagen del Cristo crucificado, de pequeño tamaño por descontado, pero no estuvo presente la cofradía de la isla, la del Cristo de la Agonía. El motivo de su ausencia no era voluntario según alguno de sus representantes, sino que ello se debía a las condiciones a las que les obligaba el párroco de Sant Ferran, que hicieron que la cofradía de la isla desistiera de participar en este gran evento religioso, pese a su intención de formar parte de ella como en años anteriores. Para algunos feligreses que prefirieron preservar el anonimato se trata de un hecho más del pulso que el párroco mantiene con la comunidad y que ha provocado diversos problemas en los últimos años.
El Viernes Santo a las 11,00 horas se inició en la parroquia de Sant Francesc el Via Crucis tradicional que congregó a un reducido grupo de fieles que siguieron con fervor las estaciones a lo largo de la plaza de Sant Francesc y de las principales calles del núcleo urbano de la capital de la isla para regresar de nuevo a la iglesia. A los fieles de la isla se sumaron algunos turistas, especialmente del Imserso que no dudaron en secundar una tradición religiosa que entre la gente de edad, principalmente, aún se mantiene. G. R.
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