El conseller de Turismo de Formentera, Josep Mayans, anunció ayer que las salinas de Formentera, s'Espalmador y los islotes de s'Espardell y Castaví forman parte de la denominación de Patrimonio Mundial de la Unesco que siempre ha capitalizado Eivissa y que aparentemente a Formentera le tocaba de refilón gracias a sus praderas de posidonea oceanica.
«Ha sido una sorpresa porque siempre ha habido un claro desconocimiento hasta la fecha y esta circunstancia, desconocida para la gran mayoría de los formenterenses, se descubrió en una reunión que mantuvimos recientemente en Ginebra en la sede mundial de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza en la que participó la persona responsable de la valoración de los bienes naturales para declarar Patrimonio de la Humanidad que por lo que a Formentera se refiere no se ciñe a las praderas de posidonea oceanica, sino que incluye las salinas de Formentera, todas las instalaciones, sistemas y artilugios relacionados con la extracción de la sal así como a s'Espalmador y los islotesnde s'Espardadell y Castaví».
Para Mayans, esta noticia es lo suficientemente importante como para comenzar a promocionar esos espacios y darles la importancia que merecen, señalando que la declaración de Eivissa Patrimonio de la Humanidad es un bien mixto del que Dalta Vila sólo es una parte del ámbito cultural pero Formentera con sus praderas de posidonea oceanica, sus salinas y la compleja arquitectura derivada de la extracción de la sal así como los islotes de s'Espalmadora, s'Espardell y Castaví, también formnan parte de ese patrimonio.
Biodiversidad
Entre los criterios para declarar dichos lugares como bienes culturales, en su apartado IV ya se señala que son susceptibles de declaración aquellos que puedan «ser un ejemplo sobresaliente de un tipo de edificio o conjunto arquitectónico o tecnológico o de paisaje que ilustre una etapa significativa de la historia de la humanidad» y en el caso de Formentera las salinas se adaptan perfectamente a esta importancia ya que fueron la riqueza principal de la isla durante largo tiempo. Y en materia de biodiversidad la pradera de posidonea de Formentera es junto a la de Eivissa la considerada mejor conservada del Mediterráneo, habiéndose descubierto en ella un ejemplar que se calcula tiene 100.000 años, el ser vivo más antiguo del mundo, además que en los fondos marinos de la zona se contabilizan más de 220 especies diferentes que forman la comunidad marina más importante del Mare Nostrum.
Mayans hizo estas sorprendentes revelaciones en el transcurso de un acto cuya finalidad era presentar dos eventos relacionados con la promoción turística como son la creación de unas rutas en kayak de mar y una competición de este deporte que se celebrará el próximo fin de semana, que comenzarán a ser presentadas en las ferias turísticas como modelo de turismo activo y sostenible, con el plus de calidad que supone realizar esta actividad ecológica dentro de un Parque Natural como es el de ses Salines y en la Reserva Marina de es Freus. Mayans cree muy importante promocionar el kayak de mar en Formentera por dos motivos: en primer lugar, porque es un deporte que puede practicarse durante todo el año; y, en segundo, por la peculiar geografía de la isla siempre permite su desarrollo en óptimas condiciones ya siempre hay algún lugar en el que se practique a resguardo de las inclemencias.