Las nuevas normas subsidiarias de Santa Eulària incluirán un mapa de ruidos para descubrir qué zonas del término municipal son las más afectadas por la contaminación acústica.
Èste es uno de los estudios solicitados por el informe de evaluación de impacto medioambiental, que depende de la Comisión balear de Medio Ambiente, por lo que deberá acompañar al nuevo planeamiento urbanístico.
Según el alcalde, Vicent Marí, el mapa de ruidos servirá también para prever «medidas correctoras» en zonas establecidas así como en las áreas de nueva implantación. «Lo que conlleva es un análisis de todo el territorio para ver qué zonas están más afectadas y qué medidas adoptar por la contaminación acústica que pueda existir», explicó el primer edil, quien destacó además que este trabajo «servirá para tener una visión global de todo el término municipal en cuanto al tema de ruidos».
Por otra parte, el alcalde aseguró que esta semana espera recibir el borrador definitivo de las nuevas normas subsidiarias. El siguiente paso será un encuentro con la oposición, el grupo PSOE-ExC, «para estudiarlas y modificar lo que haga falta porque quiero que sean una normas consensuadas; éste es mi máximo objetivo», apuntó.
Sin embargo, se trata de un planeamiento «sin grandes cambios» debido a que las modificaciones previstas, según señaló Marí, sólo estarán enfocadas a aumentar equipamiento educativo, socioculturales, deportivos e incluso viviendas de protección oficial.
Asimismo, el alcalde quiso destacar que no «hay una previsión de crecimiento urbanístico» en el nuevo planeamiento sino más bien «una reestructuración de las actuales normas transitorias del 2004, que ya eran muy restrictivas».
Otro apunte acerca de los aspectos más claros en las nuevas normas subsidiarias será el techo poblacional, que quedará prácticamente igual al que ya se contemplaba en las normas transitorias y que ronda los 60.000 habitantes. Además, el planeamiento incluirá un rasgo particular que apunta a separar el uso residencial del turístico para que no coincidan en la misma zona.
El alcalde destacó que estas nuevas normas están enfocadas a consolidar las anteriores, aunque «reestructuradas y con todos los errores que se hayan encontrado en las diferentes zonas del municipio subsanados», concluyó.
Según el alcalde Vicent Marí, las modificaciones que traerán las nuevas normas subsidiarias «son de interés general». En este sentido, y aunque el primer edil aún no puede determinar cuál será la superficie destinada a este fin, quiso adelantar que, «de todos los terrenos que hay previstos en las nuevas normas, el 80% será para equipamiento público».
Entre todo este equipamiento, Marí remarcó dos de los proyectos previstos como son un polideportivo en Puig d'en Valls y un centro cívico y social en Jesús.