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Denuncia contra los juzgados

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El delegado de prevención de riesgos laborales de la Administración de Justicia en Eivissa y Formentera, Juan Nieto, presentó ayer ante la Inspección Provincial de Trabajo un escrito de denuncia por las condiciones en las que los funcionarios de este departamento de la Administración central tienen que desempeñar su labor. Se tratra de una situación explicada reiteradamente al Ministerio y denuciada públicamente y se refiere, entre otras cosas, a que la «falta de espacio ha provocado una acumulación de equipos informáticos, fotocopiadoras, máquinas trituradoras, expedientes por todos los rincones y pasillos, armarios por doquier conteniendo todo tipo de papel y otros efectos, funcionarios que trabajan codo con codo, en condiciones de hacinamiento y, en definitiva, un lugar de trabajo que atenta contra el derecho del trabajador a realizar su labor en unas condiciones dignas , condiciones que en estas dependencias brillan por su ausencia».

La situación es, como recuerda Nieto, especialmente criticable en el sótano, «lugar donde la seguridad e higiene también deja mucho que desear». «Esta planta en el momento de producirse lluvias con cierta intensidad se anega de aguas fecales de tal manera que en este momento existe una plaga de moscas e insectos. Cabe decir que en condiciones normales siempre es previsible encontrarse con cierto tipo de roedores, cucarachas y otro tipo de insectos. No dispone dicha dependencia de una vía de escape ante un hipotético accidente», recoge literalmente en el escrito de denuncia.

Al mismo tiempo, recuerda a la autoridad laboral que los aparatos de aire acondicionado no funcionan. «Y según fuentes de la Gerencia Territorial del Ministerio de Justicia no es previsible que estén arreglados hasta bien entrado el mes de agosto, por lo que entendemos que nos pasaremos el verano a temperaturas propias de unos 'altos hornos'. «A diario por ese edificio pasan centenares de personas, tanto trabajadores como profesionales y ciudadanos quienes tenemos que sufrir los hedores, malestares, sudores, piernas hinchadas, bajadas de tensión y otros efectos causados por tales circunstancias», por lo que solicitan que se proceda con caracter de urgencia a la inspección de todas y cada una de las dependencias del edificio y «se proceda al precinto de todas ellas así como no se permita el uso por parte de los trabajadores afectados hasta en tanto sean subsanadas».

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