La recesión económica y turística está afectando de lleno al sector hotelero y de la oferta complementaria balear en la presente temporada de verano, de ahí la proliferación de anuncios de venta de hoteles, aparthoteles y agroturismos en todas las Islas en pleno mes de agosto. Desde la crisis de 1993, tras la finalización de la Guerra del Golfo, no se ha bía producido una coyuntura similar en las Islas.
Mallorca y Eivissa aglutinan la mayoría de las ofertas de venta en las páginas web de anuncios clasificados, entre ellas segundamano.es. En las mismas aparecen, a parte de establecimientos turísticos, cafeterías, restaurantes, bares, discotecas y todo tipo de oferta inmobiliaria residencial, principalmente apartamentos en las principales zonas vacacionales del archipiélago balear.
Precios
Los precios que se están barajando oscilan entre los 3,2 y 20,3 millones de euros en hoteles. Así, en Eivissa se vende un aparthotel de dos llaves con 24 apartamentos por 3,2 millones. Mallorca, pese a todo, aglutina el mayor número de ofertas de venta, como un hotel de tres estrellas (400 habitaciones) por 20,3 millones de euros, otro de cuatro estrellas por 18 millones de euros y otro de tres estrellas por 9,5 millones de euros.
Las zonas vacacionales donde se están produciendo esta situación son Calvià, Alcúdia-Can Picafort, Cala Millor y Calas de Mallorca, que son las que se han visto más afectadas por la caída de algunos mercados emisores, caso del británico o el español.
La oferta de agroturismo y hotel rural también se ha visto inmersa en esta dinámica, ofertándose un hotel rural en el noroeste de Mallorca, en plena Serra de Tramuntana, por 4,2 millones de euros.
Problemas de liquidez, ejecución de hipotecas y cansancio ante una situación económica adversa y con un horizonte nada claro sobre cómo va a transcurrir la temporada turística de 2009, son las principales causas de este fenómeno de desinversión.
Fuentes del sector hotelero apuntan que esta coyuntura adversa provocará situaciones similares a corto y medio plazo. «No es el mejor momento para vender, pero las circunstancias obligan a cada empresario a actuar según lo considere más oportuno de acuerdo a la situación financiera en la que se encuentre», puntualizan fuentes de la patronal hotelera mallorquina. Otro sector afectado directamente por la caída de ventas y productividad es el de la oferta complementaria. La lista de bares, cafeterías y restaurantes, así como de discotecas y locales comerciales que están en venta, ha ido en aumento en los últimos meses.
No ha sido un buen verano para este sector, porque la cuenta de resultados de estos pequeños y medianos comercios se ha visto afectada por la caída del gasto turístico por parte de los extranjeros y del turismo nacional.
Durante este otoño la situación se va a agravar. Empresarios de PIMEM y CAEB coinciden en señalar que el proceso de autorregulación que se vivirá en la oferta complementaria hasta el inicio de la próxima temporada alta de 2009, «va a ser muy importante, afectando al cierre de establecimientos y regulaciones de plantilla para optimizar costes».