Eivissa pel Canvi dejó ayer sin representación el Ayuntamiento de Santa Eulària tras un agitado pleno municipal que concluyó con la anunciada renuncia del concejal Joan Carles Clapés. Se trata de una dimisión que deja en solitario al PSOE en el grupo municipal de la oposición, después de que las concejalas de ExC Meritxell Rius y Emma Segura, también presentaran su renuncia el pasado lunes.
La sesión plenaria se caracterizó por amenazas mutuas entre Clapés y el alcalde Vicent Marí sobre acudir a los tribunales por la polémica de las dietas que cobraron hasta el mes de diciembre concejales del Consistorio, el primer edil y el portavoz de la oposición. En este sentido, Clapés aseguró que presentará un contencioso-administrativo contra el Ayuntamiento y contra el alcalde «por hacer este tipo de pagos», porque, según destacó, los miembros de la corporación con dedicación exclusiva o parcial «cobran un sueldo, por lo que no pueden cobrar dietas ni por asistencia a plenos ni por desplazamiento, estos últimos sin previa justificación».
Por su parte, Marí también anunció medidas legales contra Clapés al que acusó de difamar desde hace más de un mes al equipo de gobierno en los medios de comunicación y de sembrar «una sombra de dudas» sobre la institución por unas dietas que, según indicó, «son legales y están justificadas». «Ha hecho acusaciones muy graves, ha hablado de arbitrariedad, informes a medida, ilegalidades y ocultismo, y que creo que eso no puede quedar impune. Se verá si se cometió algún delito contra el honor de las personas y de la institución», destacó el alcalde.
Por otra parte, Marí aseguró durante el pleno que suspende las dietas porque ha decidido romper el consenso que había con la oposición en cuanto a la bases de la Corporación en las que están incluidas esta remuneraciones para todos los concejales, tanto de la oposición como del el equipo de gobierno. En este sentido, el alcalde aseguró que mediante el acuerdo al que se llegó a prinicipios de legislatura la oposición había logrado tener, entre otras cosas, «un concejal con dedicación exclusiva y un despacho propio». «Ahora somos nosotros los que nos desmarcamos y veremos cómo afecta a los miembros de la oposición», explicó Marí, quien señaló que las dietas quedan suspendidas hasta que las nuevas bases se lleven a pleno.
Por su parte, Clapés aseguró que con este cambio Marí da la razón a ExC. «Ante el miedo de que vayamos a los tribunales se ve obligado a darnos la razón, porque él ha sido interventor de este ayuntamiento y sabe que es el único de toda la isla que aplica esta base que permite esta ilegalidad: que se cobren dietas aparte del sueldo. Por eso imagino que buscará algún subterfugio para poderlo camuflar», apuntó.
El primer edil negó que con la redacción de unas nuevas bases dé la razón a Clapés y señaló que en ellas también habrá «gastos de representación y de locomoción, como en todos los organismos públicos». Asimismo, el alcalde aseguró que el tema de las dietas es un «paripé» que «obedece a disputas y razones internas que tienen entre PSOE y ExC». «Han buscado este asunto como excusa para desmembrarse. Lo mejor es que hubiesen debatido dentro de su grupo y no hubiesen dado este espectáculo mediático poniendo en duda la legalidad de los gastos de locomoción y representación que este ayuntamiento paga», destacó.
En cuanto a su renuncia, Clapés explicó que «viene condicionada por toda esta situación y por un descontento de que no se hayan depurado las responsabilidades que tocaba». «Creo que ExC que no ha estado a la altura y que no exigió desde un primer momento al PSOE que ante de una evidencia tan grave ejerciera las medidas adecuadas con el portavoz (José Luis Pardo), que para salvar su propia situación, ha estado a espaldas de toda esta denuncia y ha puesto algún tipo de traba», concluyó.
El alcalde Vicent Marí retó a la oposición a que devuelva sus dietas por asistencia a plenos y gastos de locomoción si creen que son ilegales y, sobre todo, a Clapés para que lo haga «por coherencia». Por su parte, el concejal destacó que si cobran estas dietas es porque no tienen dedicación exclusiva ni parcial y que son dietas «para los regidores que no forman parte de ninguna comisión de gobierno». Esta petición de Marí provocó un receso solicitado por el PSOE, que a su regreso quiso dejar claro que no cobran dietas «ilegales» y que tampoco han denunciado que lo hicieron miembros del gobierno, ni ante el pleno ni en los medios de comunicación.
Ante el ultimátum de ExC que anunció el fin de las relaciones con el PSOE en Santa Eulària mientras no dimita Pardo, la portavoz de los socialistas, Laura Carrascosa, aseguró ayer que la ejecutiva se reunirá para tratar esta cuestión «cuanto antes». Por su parte, Pardo reiteró que no dimitirá porque no ha hecho «nada ilegal» y destacó que si ExC se niega a sustituir a sus ediles «es cosa de ellos» y no del PSOE. «El grupo seguirá llamándose PSOE-ExC», aseguró el portavoz que destacó que los próximos en las listas son los socialistas Joan Boned y Jorge Roselló, y Mariano Torres, de ExC. Por último, Clapés indicó que no se va de ExC, pero afirmó que la decisión de romper relaciones con los socialistas «llega tarde cuando el mal ya es irreparable».
La impugnación del presupuesto solicitada por Clapés fue desautorizada por Marí porque, según aseguró, el edil votó a favor en un pleno de principios de legislatura en los que se aprobó el presupuesto para establecer salarios y dietas. Clapés reclamó que «cualquier ciudadano del municipio» puede presentar un recurso contra las cuentas municipales y recordó que la oposición votó en contra de todos los presupuestos de este equipo de gobierno. Desde ExC destacan que esta desautorización no tiene base jurídica.