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«Hasta los médicos dicen que es una exageración»

D.AZAGRA

Tres días ingresada en Can Misses y siete aislada en su casa tomando el ya famoso tamiflú cada 12 horas. Éste es el protocolo que está cumpliendo la joven ibicenca de 28 años que podría padecer el virus de la gripe AH1N1. Como ella, otro joven ibicenco también se encuentra recluido en su casa a la espera de que las pruebas confirmen si padecen el virus.

«Lo cierto es que me encuentro bien, con un poco de catarro. Aunque los primeros días tuve mucha fiebre, la verdad es que era como una gripe normal», asegura la joven desde su domicilio en el que se encuentra aislada desde el miércoles. «Me han dado una caja de mascarillas y me han hecho una serie de recomendaciones para estos días, como lavarme bien las manos, usar sólo toallas para mí, etc», comenta.

A esta joven, que prefiere guardar el anonimato, le parece que se ha levantado bastante revuelo con la epidemia. «Hasta los médicos me han dicho que es una exageración. En el hospital comentaban que la gripe del año pasado, por ejemplo, fue bastante más fuerte que ésta, pero entiendo que tienen que seguir un protocolo. Creo que se ha exagerado demasiado, habría que informar mejor sobre el virus: se habla de los contagiados, pero no de los que se recuperan y lo rápido que lo hacen», señala.

Esta joven asegura que tanto los médicos que la han atendido, como desde la Conselleria de Salut, le están tratando «muy bien».

Los resultados, el martes

El martes sabrá los resultados definitivos de las pruebas. «Es algo raro, porque puede pasar que después de estar así diez días igual no tenga el virus, aunque después de siete días aislada ya me da igual saber si soy negativo o positivo», asegura la joven, que espera ya con ansiedad que le den el alta para volver a su vida normal una vez terminado el tratamiento.

El posible contagio de estos dos ibicencos se ha podido producir por el hermano de uno ellos, que vive en Valencia y cuyo caso ya ha sido confirmado. Este último se contagió por un amigo que había estado de viaje de estudios en Riviera Maya, y que fue uno de los primeros casos detectados en España. «Mi hermano vino con su novia a pasar el fin de semana pasado a Eivissa. Yo el domingo pasado cuando les llevaba al barco para regresar a Valencia ya empecé a encontrarme mal, con fiebre, al igual que mi hermano y su amigo que también vive en Eivissa. Lo curioso es que la novia de mi hermano no se ha contagiado».

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