Eivissa pel Canvi presentará una proposición no de ley en el Parlament para que el Govern inste al Estado a crear unos fondos de urgencia que permitan a las Comunidades Autónomas hacer frente a los complemento de la Renta Mínima de Inserción (RMI).
Según expuso ayer la diputada de ExC, Marian Suárez, esta propuesta está destinada a que autonomías como Balears puedan hacer frente a la «creciente demanda» de estas ayudas. La iniciativa plantea que las rentas mínimas de inserción son prestaciones económicas «pensadas para que ningún ciudadano se quede sin nada para vivir y marcan un nivel mínimo de protección social que ha de garantizarse».
En opinión de la parlamentaria, estas ayudas «se caracterizan por ser complementarias al sistema de protección social, a modo de prestaciones de ayuda con carácter universal a las que debería poder acceder cualquiera que demuestre una situación de necesidad con ciertas limitaciones». Por ello matizó que deben tener un «carácter de derecho o cuasi derecho» dependiendo del estado de necesidad del demandante.
La diputada recordó que en Balears existe esta prestación desde 2001 y está gestionada por los consells y los fondos provienen en diferentes porcentajes de los presupuestos del estas administraciones en connivencia con el Govern.
Un estudio publicado por el Observatorio Social de Balears destaca que la evolución de las solicitudes de esta prestación ha aumentado «de forma destacable» desde 2008, coincidiendo con la llegada de la crisis económica, y cada vez atañen a «más población normalizada».
La diputada apostilló que entiende que el Gobierno también es «corresponsable de esta obligación», especialmente si se considera la «injusta financiación» estatal de Baleares y el notable retraso en la aprobación del nuevo sistema «que tampoco sabemos si nos resultará satisfactorio», concluyó.