El ex concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Palma Javier Rodrigo de Santos se sentará en el banquillo de los acusados a partir del lunes para ser juzgado por un tribunal popular, presidido por el magistrado Carlos Izquierdo, en el juicio que se celebrará en la Audiencia Provincial por la presunta malversación de 50.804 euros procedentes de las arcas públicas, y que entre 2006 y 2007 efectuó el ex edil en clubes de alterne masculinos y casas de masajes.
En concreto, el Ministerio Fiscal solicita para el ex regidor del PP cinco años de prisión por un delito continuado de malversación de caudales públicos, así como su inhabilitación absoluta por un periodo de nueve años, tal y como indica en su escrito de acusación, al que tuvo acceso Europa Press y en el que recuerda que cuando el encausado tuvo conocimiento de la existencia del procedimiento judicial reintegró al Consistorio la cantidad desviada.
No obstante, la defensa de De Santos, ejercida por el abogado José Ignacio Herrero, alega como atenuante la reparación del daño producido, además de haber actuado así debido a su «grave» adicción a la cocaína y haber procedido, antes de conocer que el proceso judicial se dirigía contra él, a confesar la infracción ante las autoridades.