Esquerra Unida (EU) moverá hoy ficha ante la situación de crisis política y su Presidència (dirección) tomará una decisión y abrirá un debate que puede suponer otro quebradero de cabeza para el president Antich: EU interpreta que Miquel Nadal (UM) conseller de Turisme imputado por el 'caso Can Domenge' está ya en la 'situación procesal' en que un político debe presentar su dimisión y dará «un tiempo prudencial» al president Antich para que le destituya si no renuncia.
La Presidencia de EU, partido que forma parte del Bloc, abrirá un debate sobre qué medidas deberá tomar en el caso de que Antich no quiera destituir a Nadal: dirigentes de este partido explicaron ayer que en este escenario «Antich deberá elegir entre él o nosotros». Fina Santiago, de EU, es consellera d'Afers Socials en la cuota del Bloc y Antich está muy satisfecho de su gestión.
La reunión de hoy llega un día después de la que celebró el PSM y en la que no se llegó tan lejos: el PSM prefiere esperar a que se adopten medidas cautelares contra Nadal antes de pedir su cabeza. El conseller de Turisme dijo que él dimitiría si se adoptaba alguna medida similar a la que ahora afecta a Bartomeu Vicens, que eludió la cárcel mediante fianza y por ser aforado.
Fuentes de Esquerra Unida admitieron ayer que la situación de Nadal es muy peculiar ya que también es concejal de Cort y nadie puede obligarle a dejar su asiento en el pleno. Curiosamente Eberhard Grosske es teniente de alcaldesa gracias al voto de Nadal. Esquerra Unida también tiene un conseller ejecutivo en el gobierno del Consell de Mallorca: Miquel Roselló.
La reunión de la dirección de EU se producirá cuando ya hayan trascendido los resultados del encuentro entre la presidenta del Consell, Francina Armengol y el presidente de UM y portavoz de ese partido en el pleno insular, Miquel Angel Flaquer. Francina Armengol aseguró ayer que su voluntad es llegar a acuerdos y que escuchará las propuestas que UM les pueda hacer para reconducir la situación.
Armengol hizo estas declaraciones en los pasillos del Parlament, un poco antes de que Josep Melià, negara la existencia de «negociaciones» y afirmara que Unió Mallorquina «ha pasado a la oposición» en el Consell de Mallorca.