Los controladores reconocen un "trato exquisito" de los militares durante el estado de alarma

«Los militares nos han dado un trato exquisito, mucho mejor que el que nos da AENA. Pero, si son tan buenos gestores, ¿por qué el Gobierno no le pide explicaciones a Juan de Lema (presidente de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA)», se preguntó ayer el portavoz del sindicato de controladores aéreos, USCA, Javier Zanón.
El responsable de USCA señaló que durante el periodo que ha durado la declaración del estado de alarma, en el que los controladores aéreos han estado sujetos a la legislación militar, no se han producido incidentes con el personal castrense, que a nivel general se ha limitado a ocupar dependencias en las torres y los centros de control de los aeropuertos españoles.
Críticas a AENA
No obstante, Zanón continuó acusando a AENA del caos aéreo del pasado puente de la Constitución. «El cierre del espacio aéreo fue un plan premeditado por parte de AENA», afirmó. «Había trabajadores para trabajar, AENA ya tenía a los médicos preparados por si alguno se sentía indispuesto y, además, no llamaron a los controladores que estaban de imaginaria».
El portavoz de USCA en Balears afirmó al mismo tiempo que la Ley de Seguridad Aérea, en concreto su artículo 34.4, obliga a los controladores, pilotos y mecánicos que no estén en condiciones psicofísicas adecuadas a no trabajar, bajo penas tanto económicas como de cárcel. «Hubo situaciones de mucho nerviosismo debido a las condiciones laborales», añadió Zanón.
«En Madrid se decidió cerrar el espacio aéreo cuando sólo dos controladores se habían acogido al artículo 34 de la Ley de Seguridad Aérea», afirmó el portavoz de USCA.