El Ayuntamiento de Sant Josep someterá hoy a aprobación definitiva la modificación de la ordenanza de licencias urbanísticas, cuyo principal cambio establece que no se certificarán finales de obra a edificaciones que no tengan la correcta conexión a la red de saneamiento.
«Hasta ahora nos encontrábamos con problemas porque había edificios a los que se debía dar el final de obra aunque no tuvieran la conexión hecha, y después venían los nuevos compradores y tenían que hacerla ellos, y era un lío. Es lo que queremos solucionar», explicó ayer el concejal de Política Territorial y Urbanismo, Josep Antoni Prats, sobre el motivo de esta modificación.
La normativa tuvo su aprobación inicial en marzo y, después de un período de exposición pública, volverá someterse hoy al pleno para rechazar una alegación que la Confederación de Asociaciones Empresariales (CAEB), a fin de entrar en vigor.
Licencias en 24 horas
Según detalló Prats, la CAEB no está de acuerdo con las condiciones que establece la nueva ordenanza por las cuáles «una licencia se debe denegar» o, según los errores a solventar, «se tiene que hacer un informe para que presente un nuevo proyecto». «Y esta alegación se rechaza porque si no pusiéramos condiciones las licencias se tendrían que denegar siempre, porque la jurisprudencia dice que siempre se deben denegar, y sería más contraproducente aún», destacó.
Por otra parte, Prats aseguró que la propuesta electoral del equipo de Gobierno de otorgar licencias de obra menor en 24 horas está en manos de los servicios técnicos, a los cuáles ha solicitado la redacción de un borrador para analizar las posibilidades de poner en marcha la propuesta. «Queremos resolver un poco el atasco que venimos arrastrando de años atrás en licencias de obra menor y después comenzar a aplicar el nuevo sistema», agregó el concejal, que indicó que para esta iniciativa «se debería aprobar una normativa específica de licencias de obra menor», una cuestión que está siendo analizada «por los servicios jurídicos».
Deberá revisar por sentencia la concesión de ocho licencias de taxis
En el pleno de hoy Sant Josep también someterá a aprobación el inicio de los trámites para revisar ocho licencias de taxis otorgadas en 2008. Las mismas fueron recurridas ante el Juzgado Contencioso Administrativo de Palma por un taxista asalariado, cuyo recurso fue admitido. Según explicó la teniente de alcalde, Paquita Ribas, el recurrente no está de acuerdo con la forma de considerar la antigüedad de los taxistas, ya que el Consistorio lo calcula en base a los meses por año trabajado y el taxista considera que se debe contar cada año completo desde el inicio de su trabajo al frente de un taxi.
En este sentido, el juez pide a Sant Josep que utilice el otro criterio para calcular la antigüedad, con la misma mesa de contratación convocada entonces, que debe tener también representación de un miembro del PP.
De igual forma, Ribas explicó que las licencias otorgadas hace tres años no se revocarán y que se buscará una solución dependiendo del resultado del nuevo cálculo.