Los expertos ven peligrosos para la sanidad los despidos del Ibabsa en Balears, la totalidad de la plantilla de Eivissa

La exdirectora del Instituto Balear de Biología Animal de Baleares (IBABSA) Catalina Aguiló ha advertido hoy de que la seguridad en control de epidemias como la peste porcina, la lengua azul y las vacas locas, quedará comprometida tras el despido de 22 trabajadores que realizan una labor «imprescindible».
El responsable de empresas públicas de UGT, Jordi Rivas, ha dicho hoy en una rueda de prensa que «dejar a la mitad» la empresa pública más antigua de Baleares, el IBABSA, comprometerá la seguridad alimentaria, ya que con menores recursos humanos se deberán realizar los mismos controles sanitarios y certificaciones.
Rivas ha denunciado el despido «nulo» de 22 de los 53 trabajadores del Instituto Balear de Biología Animal de Baleares (IBABSA) y ha anunciado que en septiembre UGT presentará una demanda por vulnerar el derecho fundamental a la negociación colectiva, al entender que el Govern ha violado la Constitución Española.
El responsable de empresas públicas de UGT ha explicado que IBABSA no ha entregado el plan de recursos humanos, en el que se establecen las líneas por las que se justifican los despidos y, por eso, entienden que el Govern «no tiene argumentación».
Aguiló, que estuvo en la jefatura de la empresa pública durante 32 años y que también ha sido despedida, ha explicado que el control de la cadena alimentaria es «imprescindible» para que los alimentos lleguen en perfectas condiciones para el consumo humano.
La especialista ha detallado que los trabajadores que aún continúan en IBABSA realizan «bajo amenaza de despido» su labor de analizar el pienso, el nivel de antibióticos en animales, el control de bacterias en los quesos, entre otros, ya que, según ha destacado, «el estatus sanitario animal implica salud humana».
Después de los despidos, ha continuado, la seguridad en control de epidemias como la peste porcina, la lengua azul y las vacas locas, puede quedar comprometido al reducir los recursos humanos para una actividad que es «imprescindible».
Aguiló, que ha advertido de que aunque los trabajadores desaparezcan «los virus no», ha recordado que IBABSA está acreditada por la Unión Europea para realizar sus labores de forma oficial y la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) acudirá en noviembre a una auditoría para renovar esta competencia técnica.
El exjefe del Departamento de Sanidad Animal Pep Cerdà ha explicado que con la eliminación por parte del Govern de las «granjas centinela», que informaban de la evolución de población de moscas y virus circulantes, se tardará en obtener los datos necesarios para el control de alarmas.
Cerdà ha recordado que Baleares fue la primera comunidad que sufrió la epidemia de la lengua azul, que puede surgir en los meses de septiembre y octubre y ha añadido que aunque ya no se hable de las vacas locas, se siguen tomando muestras a los bovinos, que ahora tardarán más en analizarse y «unos resultados tardíos no sirven de nada».
El exjefe del Departamento de Sanidad Animal ha denunciado además que el primer cuatrimestre de este año no se han vacunado a los cerdos de la enfermedad de Aujeszky y ha añadido que el lema de la profesión veterinaria es que «la salud de los animales es la salud de las personas».
El extrabajador de IBABSA y presidente del comité de empresa, José Manuel Alanzor, ha acusado a la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio de no tener objetivos al cerrar IBABSA en Ibiza sin planificar quién se encargará ahora de esas funciones en las islas.
Alanzor, que ha criticado la «política de enchufados», ha dicho que es «llamativo» que el Govern despida a 6 veterinarios del IBABSA y después abra un bolsín de veterinarios autónomos que, por ejemplo, cobrarán 12 euros por visitar una explotación ganadera.
Para Aguiló estos precios son «de veterinario del sudoeste asiático», por lo que ha asegurado que desde UGT continuarán con las movilizaciones, tanto a nivel judicial, como con las protestas de los viernes en las sedes oficiales.
UGT demandó hace dos meses a IBABSA por la contratación irregular de un alto cargo y presentó otras 13 demandas por despidos nulos de trabajadores de la empresa pública la semana pasada.