El 20 de mayo de 2011, cinco días después de que el mundo mirase hacia la madrileña Puerta del Sol mientras el Movimiento 15-M daba sus primeros pasos, en Eivissa se constituía Ibiza Toma la Plaza. En aquella jornada y tras su primera convocatoria, 1.500 personas salieron a la calle, una cifra que, según recuerda Octavio, uno de los integrantes de este movimiento ciudadano, «superó con mucho a la de los mítines del PP y del PSOE que se celebraban en Eivissa y a los que acudieron 500 y 300 personas respectivamente según los medios».
Han pasado dos años e Ibiza Toma la Plaza prosigue su marcha, «construyendo alternativas para el día en que este sistema insostenible se caiga solo». Octavio es un indignado más en Ibiza Toma la Plaza. Porque este movimiento ciudadano «horizontal y no violento» no quiere líderes ni portavoces, todas las decisiones se toman por consenso.