Vecinos de Talamanca alertaron ayer sobre un nuevo vertido de fecales al mar desde el emisario submarino de la depuradora de Vila. La fuga se habría producido en la tarde del lunes y con el paso de las horas el vertido se hizo más grande, según denunció una testigo presencial. Aunque una embarcación de Abaqua se personó de inmediato, la avería todavía no había sido resuelta ayer al cierre de esta edición. Esta redacción trató sin éxito de contactar con la Agencia Balear del Agua (Abaqua). Según varios testimonios, la fuga vendría de otro punto del emisario distinto al que fue reparado recientemente con la instalación de una brida.
El presidente de la asociación de vecinos de Talamanca y s'Illa Plana, José Colomar, lamentó este nuevo vertido a las puertas de la Semana Santa: «No hay derecho a que todo el mundo se esté gastando un dineral y que tengamos esto en la bahía. Los hoteles han hecho importantes reformas, se prevé una elevada ocupación y justo cuando van a abrir, pasa esto. Es de vergüenza».
Colomar advirtió que la asociación se plantea denunciar «a los responsables de mantener la infraestructura en buen estado [conselleria balear de Medi Ambient, Ayuntamiento de Vila y Consell d'Eivissa]» ante la Organización Mundial de la Salud (OMS) por lo que consideran «un atentado contra la salud pública».
Análisis
Por otra parte, el diputado ibicenco del Partido Popular, Vicent Serra, denunció ayer en el Parlament balear la «absoluta descoordinación» entre la Conselleria de Salut y el Ayuntamiento de Vila durante el pasado mes de septiembre a la hora de comunicar los análisis efectuados en la playa de Talamanca por el vertido procedente del emisario de la depuradora. «Lo que no puede pasar es que si los resultados tardan de 48 a 72 horas se tarde una semana en publicar los datos y no haya contacto entre la conselleria y el ayuntamiento correspondiente para avanzar en las actuaciones. Esto pasó en la playa de Talamanca, el pasado septiembre, donde hubo una absoluta descoordinación con el ayuntamiento para recoger las muestras y una incomunicación completa para avanzar los resultados», aseguró Vicent Serra, quien pidió a la consellera de Salut, Patricia Gómez, que «revise los protocolos, porque hay una absoluta descoordinación en su conselleria».
Gómez, por su parte, señaló que en cada punto de muestreo se recogen «un mínimo de ocho muestras» y que la población «puede estar tranquila porque en 2015 la calidad del agua para el baño en las playas, incluida la de Talamanca, fue excelente».