El servicio de Urgencias del hospital Can Misses recuperó ayer la sala de pediatría para niños que fue habilitada provisionalmente anteayer para atender la demanda asistencial del hospital Can Misses.
No obstante, aún ayer, a última hora de la mañana, había varios pacientes, unos dos o tres, esperando en Urgencias una cama de hospitalización, según aseguraron desde el Ibsalut.
Comisiones Obreras (CCOO) aseguró que Can Misses estaba sin camas, con las habitaciones individuales de hospitalización que se han doblado, y con pacientes a la espera de una cama libre en el servicio de Urgencias.
La presión de Urgencias se ha disparado en Semana Santa y ha supuesto que en la zona de pediatría se habilitara como boxes de hospitalización de adultos. A primera hora de la tarde del martes, entre pacientes ingresados y los que estaban esperando a ser atendidos, había un centenar de pacientes. Alrededor de unos quince estaban esperando una cama.
Los cambios de temperatura han originado un aumento de las infecciones respiratorias estos días, sobre todo en personas mayores, que ha ocasionado que se dispare el número de ingresos. A esto se suma que no se han dado altas hospitalarias en los días de fiesta en el hospital lo que ha desencadenado esta saturación y ha ocasionado el embudo en Urgencias.
CCOO denunció la saturación del hospital Can Misses. «No hay camas en las plantas de hospitalización. Las habitaciones individuales se han doblado y no ha llegado el verano», denunció la delegada sindical de CCOO, Silvia Fernández. Además, aseguró que tampoco hay camas en UCI y tenían que trasladarse pacientes a Mallorca. «Es muy fuerte que no haya camas en un hospital nuevo que tiene unos pasillos tan grandes». Fernández denunció la falta de personal y aseguró, además, que se está utilizando a personal en prácticas como refuerzo de celadores. «Tienen que contratar a gente no utilizar a personal en prácticas», dijo.
Poco funcional o mal gestionado son algunos de los calificativos de los trabajadores al nuevo hospital. Servicios como Urgencias llevan desde hace tiempo arrastrando problemas de organización y con un sistema de turnos que le hace poco eficaz, que ha ocasionado los problemas de saturación y las quejas de pacientes por los tiempos de espera, disparando el número de reclamaciones.