El Partido Nacional Liberal (PNL) de Rumanía, afiliado al Grupo del Partido Popular Europeo, aclaró ayer a través de un comunicado al diputado Enric Casanova que «España es nuestro país de acogida, es nuestro hogar», y lamentó la situación que se produjo con la propietaria de origen rumano de un bar situado en Eivissa, al tiempo que rechazó «su comportamiento xenófobo».
Según recordaron, el pasado viernes 27 de mayo el diputado socialista habría pedido un té en catalán y, al no ser entendido, se dirigió «de malas maneras» a la mujer, según la versión de la propia afectada.
Desde el Partido Nacional Liberal Rumano expresaron su «solidaridad» con la víctima de esta agresión y exigieron «responsabilidades políticas para que episodios de este tipo no vuelvan a ocurrir».
El presidente del PNL Diáspora España, Marius Ioan, dijo que «el respeto y la tolerancia son los pilares fundamentales de la convivencia». «Si un cargo público no entiende y no tiene en cuenta estos valores, no vale para la política», añadió.
«El señor Casanova ha tenido un comportamiento vergonzoso e intolerable. Le recuerdo al señor diputado que hay más de 700.000 rumanos en España, de los cuales unos 12.000 en las Islas Balears, gente trabajadora y honrada, que han emigrado en búsqueda de una vida mejor. Ellos también pagan su sueldo público», indicó Ioan.
Asimismo, entre otras cuestiones, aseguraron desde el PNL que el diputado «no respeta los valores europeos, por lo que no es digno de ser un cargo público» y se cuestionaron «qué opina sobre este incidente xenófobo el Grupo Federal Rumano del PSOE».
«Si los socialistas no supieron, ni quisieron solventar un problema de xenofobia generado por el comportamiento de su cargo político, significa que no quieren seguir teniendo en cuenta a la comunidad rumana, la principal población extranjera residente en España. Demuestra que los socialistas no saben convivir en una España europea y diversa ni están preparados para gobernar para todos», concluyeron desde el partido rumano.
LA NOTA
Exigen explicaciones al PSIB
El partido rumano pide explicaciones al PSIB y le exige que expediente al diputado Enric Casanova. El partido rumano explicó que los socialistas “no saben convivir en una España europea”. Por su parte, los socialistas de Balears salieron en defensa de su compañero de partido ya que consideran que el agredido verbalmente fue el diputado, no la camarera. “Entiendo que fue un suceso lamentable”, dijo Oliver, quien añadió que fue el parlamentario el que fue “objeto de agresión”, aunque él “no agredió verbalmente, ni de otro tipo a esa persona”. Un día después, Ciudadanos exigió a los socialistas responsabilidades por la actitud del diputado, mientras que el PP reclama la dimisión de Casanova.