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La falta de socorristas pone en riesgo a alumnos de varios colegios en ses Salines

Una pequeña, acompañada de un adulto, intenta subir la rampa de una torre de vigilancia sin servicio en ses Salines. | Daniel Espinosa

| Eivissa |

La temporada turística arrancó en la isla hace más de 40 días y en una de las playas más concurridas, la de Migjorn, más conocida como ses Salines, continúa sin haber servicio de salvamento y socorrismo, como sucede en todo el municipio de Sant Josep.

Varios grupos de niños y niñas de Primaria de los centros escolares s'Olivera y Puig d'en Valls, del municipio de Santa Eulària, y Mestral, de Sant Josep, coincidieron ayer en ses Salines en diversas excursiones organizadas por sus tutores y profesores. Una serie de alumnos sufrieron picaduras de medusa y, ante la falta de socorristas, tuvieron que ser atendidos por los hamaqueros del servicio de playas, quienes calcularon que tuvieron que aliviar a una veintena de ellos. También indicaron que al no disponer de los medios adecuados para tratar las dolencias, algunos de los niños tuvieron que marcharse a casa acompañados.

Entre los trabajadores consultados cundía la preocupación. «No hay socorristas ni seguridad, esto es la playa sin ley. Seguramente el Ayuntamiento habrá sacado un precio muy bajo para las empresas de salvamento de playas, y ninguna se hace cargo. ¿Por qué hay que poner en riesgo así a la gente? ¿Y si alguien se ahoga, también le salvamos nosotros», se preguntaban.

La playa de ses Salines es, precisamente, la única del municipio con la catalogación de ‘riesgo alto' por su longitud y su elevado número de visitantes. Y a pesar de que la puesta en marcha del servicio de socorrismo se establece para el 15 de mayo, a 10 de junio las torres de vigilancia seguían vacías y clausuradas.

Ayuntamiento

Fuentes municipales señalaron ayer que mientras no entre en funcionamiento el servicio de salvamento y socorrismo, «es obligación de los hamaqueros prestar los servicios adecuados» a los veraneantes.

Desde el Ayuntamiento admitieron que la redacción del pliego de condiciones para la licitación de este servicio «se ha retrasado» y que no fue hasta la pasada semana cuando se adjudicó a la empresa ganadora del concurso. «Desde entonces, tiene 15 días para su implantación, pero les hemos pedido si pueden comenzar ya este fin de semana», subrayaron fuentes oficiales, quienes reconocieron que el hecho de haber sido «muy escrupulosos» en los requisitos de contratación, sumada a la limitación de personal, «ha hecho que haya pasado más tiempo del deseable y del deseado».

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