La buena temporada no repercute en las condiciones laborales de hostelería

Las condiciones de los trabajadores de hostelería de Eivissa siguen siendo las mismas a pesar de que los establecimientos tienen más clientes que nunca y sus precios son más caros. Así lo asegura Consuelo López, de CCOO, que explica que los únicos que tienen mejores condiciones de trabajo son los fijos discontinuos con antigüedad «porque a las empresas les cuesta más dinero el despido». Sin embargo, los trabajadores eventuales y los fijos discontinuos recientes ven cómo «se les señala la puerta de salida cuando reclaman mejores condiciones laborales», explicó López. De hecho, la mayoría de los expedientes que llegan al TAMIB son por despidos. Concretamente, según las cifras de CCOO, 15 de cada 20 se refieren a despidos.
De la misma opinión es el secretario general de Hostelería de UGT, Fernando Fernández, que pone de manifiesto que «aunque los datos de mayo y junio han sido buenos esto no se refleja en el crecimiento de contratos fijos o fijos discontinuos y sí que aumenta la contratación temporal, aunque en realidad luego estos trabajadores hagan jornadas de 40 horas y las horas sobrantes se paguen como extras». Las expectativas, según Fernández, eran buenas «pero no están dando frutos. De hecho, en junio se han hecho más de 1.000 contratos de los que sólo 80 o 90 son fijos o fijos discontinuos». Además, el sindicalista explica que, según el convenio de hostelería, el 75% de la plantilla tendría que ser fija o fija discontinua «pero esto no se cumple» y esta es una de las reivindicaciones importantes que se plantea su sindicato.
Fernández no entiende el temor de los empresarios a hacer una plantilla estable y denuncia prácticas para que los trabajadores sigan siendo eventuales después de años en la empresa. En concreto, «en Eivissa se contrata por 2 años, se deja un año sin contratar y luego se vuelve a contratar a la misma persona. Así no se puede tener una plantilla estable y luego se quejan de que no encuentran trabajadores», asegura. Además, a este problema se une el de la falta de vivienda que está haciendo que este año haya menos trabajadores disponibles.
Tanto en el sindicato UGT como en CCOO se refieren a la campaña de la Conselleria de Treball contra el empleo precario que debería denunciar estas prácticas. «Menos mal que los inspectores están obligando a los empresarios a hacer fijos discontinuos a muchos trabajadores, que sin su intervención serían eventuales toda la vida», asevera la secretaria de hostelería de CCOO.