La Dirección General de la Policía Nacional ha abierto una investigación interna para esclarecer el «disparo accidental» producido en el interior de un avión que se disponía a realizar un vuelo Eivissa-Madrid el sábado por la mañana.
El incidente se desencadenó cuando a un agente de la Policía Nacional se le disparó su pistola en el momento en que entregaba su arma reglamentaria al comandante del vuelo junto a otros tres compañeros que regresaban a Madrid tras prestar servicio en Eivissa.
Protocolo
Según informaron fuentes de la Policía Nacional, la investigación se abre siguiendo el protocolo de actuación marcado por el Cuerpo en este tipo de incidentes.
No obstante, las mismas fuentes subrayaron que los agentes que estaban de servicio en Eivissa y regresaban a Madrid siguieron el protocolo de entrega de sus armas reglamentarias al comandante del vuelo. En este sentido, indicaron que el «disparo fortuito» se produjo cuando uno de los agentes estaba asegurando la pistola, siguiendo las instrucciones de realizar la maniobra apuntando a un punto que no entrañe cualquier riesgo. Las fuentes consultadas apuntaron que el agente estaba montando el seguro de la pistola en el interior de una maleta. El disparo causó cierto nerviosismo entre el pasaje que se vio sorprendido por la detonación del arma. El proyectil no causó ningún tipo de daño físico.
Los hechos ocurrieron momentos antes de despegar el avión desde el aeropuerto de es Codolar. Tras el disparo, el responsable del vuelo VY3420 solicitó la asistencia de los ingenieros para certificar que la bala no había causado ningún daño en la aeronave, así como de agentes de la Guardia Civil que levantaron acta de lo acontecido.
Una vez realizada todas las comprobaciones pertinentes, el vuelo con destino al aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid-Barajas, salió con media hora de retraso.