El Ayuntamiento Sant Josep exigió ayer la puesta en marcha «inmediata» de la interconexión de la zona de Sant Jordi con el anillo de las desaladoras, que no está en funcionamiento a pesar de que las obras finalizaron el pasado 26 de julio.
El consistorio ha expresado su «profundo malestar» y ha exigido en un comunicado «celeridad» a los responsables, para que el municipio pueda contar con agua desalinizada.
El alcalde del municipio, Josep Marí Ribas ‘Agustinet', habló ayer con los responsables de la conselleria de Medi Ambient, Agricultura i Pesca del Govern para transmitirles su «preocupación y malestar» por el retraso, que tilda de «injustificable».
Desde el Ayuntamiento aseguraron en un comunicado que hacen un seguimiento diario del proceso y que le consta que las pruebas de presión fueron satisfactorias, «pero desde Abaqua han informado que aún no han recibido los resultados de Sanidad», precisaron. También recordaron que una vez finalizadas las obras, el conseller de Medi Ambient, Vicenç Vidal, anunció que se necesitaban 15 días para realizar las pruebas de presión en las tuberías así como análisis de sanidad antes de su puesta en marcha. Ya han pasado dos semanas desde entonces.
Desde Sant Josep recuerdan que esta interconexión permitirá suministrar agua desalada a la zona de San Jordi y alertan de que, a pesar de las mejoras realizadas en la desaladora de ses Eres, ésta puede volver a fallar por tratarse de una «maquinaria que hace muchos años que ya ha finalizado su vida útil».
«Por eso es tan necesaria la esperada conexión con el anillo de las desaladoras de la isla, y es inadmisible que no sea una prioridad de primer orden para todas las entidades implicadas», criticó Sant Josep.