La comisión de Turisme celebrada ayer en el Parlament vivió ayer una situación un tanto insólita. La diputada popular Tania Marí presentó una proposición no de ley para que el Govern incluya como proyecto prioritario a ejecutar con fondos de la ecotasa el derribo de la construcción en ruinas de Cala d'en Serra «y devolver a su estado original este espacio de alto valor paisajístico».
La proposición fue aprobada con seis votos favorables del PP y Podemos y con cinco abstenciones de PSOE, Més per Mallorca y Més per Menorca.
Reunión
Para la diputada Tania Marí, la abstención de los socialistas demuestra una «doble moral que nunca llegaremos a entender. No entendemos cómo los socialistas no votan a favor de un proyecto que en Ibiza lo llevaban en su programa electoral y ayer [por el miércoles] incluso el presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Torres, mostró en una reunión con el alcalde de Sant Joan su defensa de que estas ruinas se derrumbaran con fondos de la ecotasa», explicó la diputada popular. Para Marí no existe la «voluntad política por parte de los socialistas de llevar adelante este proyecto que devolverá a su estado original este espacio de alto valor paisajístico. Ellos venden humo. Dicen que quieren proteger el territorio, el medio ambiente y los espacios naturales y a la hora de la verdad son incapaces de votar a favor de una propuesta que supondrá un beneficio para la isla y sus habitantes, que podrán disfrutar de un espacio natural recuperado». Marí mostró su satisfacción de que la proposición haya salido adelante ya que estas ruinas hace años que se están deteriorando y se hace un uso inadecuado y peligroso de la construcción, como por ejemplo, se utiliza como aparcamiento, prácticas de juego simulando escenarios de guerra, acampadas ilegales y otras actividades que ponen en peligro la seguridad de las personas. «En Cala d'en Serra ganaremos en medio ambiente y seguridad», concluyó Marí.
Por su parte, los socialistas dijeron que se abstuvieron de la votación porque los proyectos de la ecotasa se tienen que votar en la comisión del impuesto sostenible.
La formación morada, por su parte, se felicitó por la aprobación de esta proposición y espera que el derribo llegue a su término tal y como se aprobó ayer en el Parlament. El diputado Salva Aguilera recordó que esta construcción ocupa 10.000 metros cuadrados en una zona sensible de la costa y que hace cinco décadas que se habla de demolerlo. Sobre su apoyo a la moción popular, Podem explicó que dio soporte a la proposición no de ley para que saliera adelante «al considerar que ya es hora de que se actúe de una vez por todas para demoler esta construcción que se arrastra desde la legislatura de 1999 cuando el Govern se comprometió a demoler la construcción inacabada en Cala d'en Serra como proyecto previsto en Ibiza financiado por la ecotasa que debía estar concluido en el año 2003 cuando se acabara la legislatura». Para el diputado Salva Aguilera el hecho de que esta construcción se tire con dinero de la ecotasa significará que la «ecotasa se hará visible, tanto para la ciudadanía como para los visitantes, demostrará que su dinero tiene la utilidad de proteger el medoi ambiente porque, precisamente, una ecotasa más verde, más eco, es lo que reclama Podem».
LA NOTA
Podem no entiende la abstención de Més y PSOE
Respecto a la abstención de los miembros de gobierno, PSOE y Més, el diputado Salva Aguilera explicó ayer que no entienden la postura de ambas formaciones. «No lo entendemos. Si nos llenamos la boca cada día diciendo que queremos proteger el territorio y no le dan apoyo. Ya es hora de actuar y de dejarnos solo de palabras. Después de casi cinco décadas de no hacer nada no se puede esperar más para tirarlo». En este sentido, Aguilera añadió que «después de todo lo que hemos escuchado durante estos meses alrededor del impuesto turístico y de sus posibles finalidades recuperar espacios de un alto valor paisajístico, como este de Cala d'en Serra, debe ser el verdadero objetivo de los fondos del impuesto sostenible». Para Podem «está claro que tanto residentes como visitantes entienden que tenemos que salvaguardar nuestro turismo y minimizar el impacto que tiene esta actividad en nuestra territorio». Por último, Podem espera que el derribo llegue a hacerse, tal y como se aprobó ayer en el Parlament.