La Alianza Mar Blava explicó ayer que 2017 será un «año clave» para lograr la protección legal del Mediterráneo frente a las prospecciones de hidrocarburos.
Asimismo, consideró que el balance del trabajo realizado en 2016 es «muy positivo», pues se ha logrado consolidar de forma significativa el proceso de la futura declaración del Corredor de Migración de Cetáceos como Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo (ZEPIM) del Convenio de Barcelona. La declaración deberá ser aprobada en 2018.
Con todo, desde la Alianza destacaron que se ha concluido la redacción de una proposición de Ley para la declaración de las aguas jurisdiccionales españolas del Mediterráneo como zona libre de prospecciones de hidrocarburos.
La Alianza también explicó que 2016 ha sido un año de crecimiento en cuanto a miembros y de reconocimiento público a su labor, hechos que han reforzado su voluntad de seguir trabajando para defender e incrementar la riqueza ambiental del mar Mediterráneo y sus costas.
Según recordaron, tras una larga lucha jurídica contra la tramitación irregular del proyecto de Services Petroliers Schlumberger en el golfo de León, el pasado 8 de julio la Secretaría de Estado de Medio Ambiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) emitió una Resolución de terminación del procedimiento de evaluación de impacto ambiental de este proyecto.
El 25 de octubre, según recordaron, el BOE publicó la Resolución de 20 de septiembre de la Dirección General de Política Energética y Minas del Ministerio de Industria, Energía y Turismo (MINETUR), por la que se declaraba concluido el procedimiento de autorización del proyecto y se archivaron las actuaciones realizadas.
Por otra parte, en julio de 2016 se logró que el proyecto MedSalt-2, promovido por el Instituto Nazionale de Oceanografía e Geofisica Sperimentale de Trieste (Italia) en aguas de Mallorca, Ibiza y Formentera, no obtuviera la declaración de impacto ambiental simplificada que había solicitado. De esta manera, el promotor tendría que volver a iniciar el proceso y pasar por un procedimiento de evaluación ambiental ordinario.
Reto
El mayor reto al que se enfrenta la Alianza en 2017 es conseguir que la Proposición de Ley para la declaración de las aguas jurisdiccionales españolas como zona libre de prospecciones de hidrocarburos sea discutida y aprobada, primero en el Parlament balear y luego en el Congreso de los Diputados.
Además, según avanzaron, la Alianza seguirá trabajando para lograr el archivo definitivo de todos los proyectos de prospecciones petrolíferas actualmente en tramitación, como el proyecto de Spectrum Geo Limited en el mar balear; el de perforación de pozos de Repsol en el área Casablanca, frente a las costas de Tarragona; los doce permisos de investigación de hidrocarburos Nordeste 1 a Nordeste 12 solicitados por Cairn Energy en el golfo de León; así como el permiso Medusa solicitado por Repsol, Cepsa y otras dos petroleras, también frente a las costas de Tarragona.
La Alianza también quiere conseguir que el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) apruebe en 2017 una Orden ministerial que le dé soporte normativo y que establezca, entre otros, un riguroso régimen de protección preventiva, adoptando medidas estrictas de gestión de las actividades productoras de ruidos submarinos en la zona.