La sección segunda de la Audiencia Provincial escuchó ayer el testimonio de los agentes de la Udef y de la científica de la Policía Nacional de Ibiza que investigaron los robos perpetrados por una banda organizada juzgada por un decena de golpes en Ibiza.
El tribunal escuchó las explicaciones de los investigadores y en la sala también se visionaron las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de La Cava y del Hard Rock Hotel, dos de los establecimientos asaltados por la banda en el verano de 2015.
Tras tres días de sesiones, hoy está previsto que el juicio quede visto para sentencia. Los abogados de los cinco acusados han tratado de anular partes de la investigación o desacreditar algunas pruebas, pero los agentes que han comparecido por videoconferencia desde los juzgados de Ibiza han subrayado los resultados y la contundencia de las pruebas recabadas.
Según la investigación policial, los cinco acusados tenían como base de operaciones un piso en Cala de Bou. En este punto planeaban la cadena de golpes que arrancó el 27 de junio de 2015 en Puig d'en Valls. Los acusados reventaron un acceso de la empresa Ibiza Private Boat Center y se llevaron una caja fuerte con 7.500 euros.
Cinco días después, asaltaron las oficinas del Grupo Alonso Marí en Ibiza. Aquí, utilizaron un soplete para abrir dos cajas fuertes y hacerse con un botín de 2.200 euros. Tras un pequeño paréntesis, el 23 de julio se hicieron con un botín de más de 12.000 euros en el restaurante La Cava de Ibiza.
Las investigaciones llevadas a cabo vinculan a varios acusados con Francisco Javier Martín Sáez, más conocido como ‘el Niño Sáez', delincuente considerado como el rey del butrón y que fue asesinado hace diez días en Madrid.
Los cinco hombres están acusados de cometer una decena de robos usando la fuerza en locales comerciales de la isla con el agravante de pertenencia a grupo criminal. La Fiscalía solicita una pena de 12 años y medio de cárcel para Mohamed E.K., considerado el jefe del grupo. Fernando Miguel B.P. y José Luis D.G. se enfrentan a penas de 8 años de prisión. Estos dos acusados actuaban junto al líder en los golpes. Los otros dos acusados: Anas M. H., y Mourad B., se enfrentan a penas de un año y nueve meses de prisión.