La llegada de nuevas tendencias no sólo implica cambios en cuanto a moda sino que el mundo de la belleza también se transforma y algunas tendencias dejan de llevarse para dar paso a nuevos colores, estilos y texturas.
Dicen que las uñas son como el punto final de una frase. Y es que las adictas a la manicura reconocen su poder para completar y realzar un look.
Con la llegada del buen tiempo y esos largos días de sol reinan los colores vivos y atrevidos aunque siempre habrá un lugar reservado para los clásicos tonos terrosos y naturales.
Este verano los colores vivos y brillantes son una de las tendencias top en cuanto a laca de uñas destacando toda la gama de rosas, desde los tonos pastel más suaves y coquetos hasta el fucsia más estridente.
Por otra parte, el greenery es uno de los colores favoritos para esta temporada tanto en textil como en belleza y lo mismo ocurre con toda la gama de tonos relacionados con el mar como el azul, el turquesa o el verde marino, que cada año tienen más aceptación entre las nail adictas.
Uno de los grandes hits es el blanco típex, protagonista absoluto en imágenes de Pinterest e Instagram tanto en manos como en pies. Aunque los expertos aseguran que si hay un tono que se lleva la palma, estos son los nude y los pastel. Son tonos románticos y dulces que combinan con todo.
En cuanto al mundo del nail art, que ya sí que es apto sólo para las más atrevidas, se llevan las combinaciones de colores creando formas geométricas, los tonos metálicos y el efecto espejo o marmolado siendo los más delicados y discretos los más exitosos. Olvídate de las decoraciones con flores, muñequitos o letras que han quedado relegados al grupito de esos pequeños errores del pasado que todas hemos cometido alguna vez.
Como veréis, no hay normas estrictas a la hora de elegir nuestro color de uñas, simplemente debemos elegir de entre todas las posibilidades el que mejor se adapte a nuestra personalidad y jugar con las distintas opciones que nos ofrece el mercado.