El todavía segundo teniente de alcalde de Sant Antoni, Juanjo Ferrer, pretende finiquitar el tripartito y planteará a sus otros dos compañeros del PI una moción de censura contra el alcalde Pep Tur ‘Cires', quien el pasado viernes firmó un decreto que le dejaba sin sus atribuciones en urbanismo y actividades.
Una moción de censura que tan solo prosperaría si tuviese el apoyo de los tres concejales del PI y de los ocho del Partido Popular, que sumarían once votos por los diez de PSOE y Reinicia.
Sin embargo, todavía está por ver si los otros dos concejales de la formación regionalista, Joan Santa y Cristina Ribas, estarían por la labor de abandonar el equipo de gobierno, como así hará su portavoz, Juanjo Ferrer, o si prefieren aferrarse a la silla a pesar de los desencuentros y humillaciones sufridos por su líder con otros miembros del tripartito.
Otra de las opciones es que Juanjo Ferrer entregue su acta de concejal y sea sustituido por el siguiente en la lista electoral, que en este caso sería el fisioterapeuta Paquito Fernández.
Los militantes del PI han sido convocados a una reunión de partido para que los concejales expliquen la situación en el Ayuntamiento y se tome una decisión definitiva sobre la continuidad de los regidores en el equipo de gobierno.
Las disputas entre los miembros del tripartito han surgido a raíz de la aplicación de la nueva ordenanza de la vía pública, que ha establecido una reducción en los horarios de las terrazas. Mientras Juanjo Ferrer, responsable de Urbanisme i Activitats, era partidario de iniciar las inspecciones de manera progresiva, la responsable de la Policía Local, Aída Alcaraz, ordenó a los agentes que empezaran a multar desde el minuto uno de su entrada en vigor. Además, el primer teniente de alcalde, Pablo Valdés, también dejó sin competencias a Juanjo Ferrer durante cinco días en los que el del PI estuvo de vacaciones mientras figuraba como alcalde accidental ante la ausencia de ‘Cires', también de vacaciones.
LA NOTA
Un equipo de gobierno salpicado de polémicas
En poco más de dos años de gobierno, el equipo de gobierno tripartito de Sant Antoni ha estado envuelto en numerosos casos polémicos. El alcalde ‘Cires', nada más llegar, tuvo que lidiar con la dimisión del jefe de la Policía Local, Javier Verdugo, que finalmente continuó en el cuerpo. Sin embargo, se contrató a Ángeles Gallardo como directora técnica de Seguridad. Un ‘fichaje' irregular ya que su plaza no estaba prevista en la plantilla de la corporación. Posteriormente llegaron las mofas de Aída Alcaraz y Pablo Valdés en las redes sociales sobre la falta de uniformes de invierno de los policías locales. Un asunto que provocó que ambos tuvieran que acudir al retén para disculparse personalmente ante los agentes.
Los que deciais que la crisis de Sant Antoni era un invento del Periodico leed hoy Diario de Ibiza y en el futuro elegid bien a la hora de informaros. Buena semana.