La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Pilar Costa, lanzó ayer un jarro de agua fría sobre la incorporación de Podemos al Ejecutivo en esta legislatura, que es la opción que ha defendido el anterior secretario general, Alberto Jarabo, y sobre la que tendrá que pronunciarse la dirección surgida de las primarias y que, desde el jueves, lidera Mae de la Concha.
Costa, después de dar la enhorabuena a de la Concha (que ayer se incorporó al Consejo Ciudadano Estatal de Podemos), indicó que «no es deseable ni prudente» un cambio en el reparto de fuerzas del Ejecutivo cuando «estamos en la recta final de la legislatura». Costa sí abogó por la participación del partido morado en el Govern que surja de las elecciones de 2019. La portavoz agradeció la estrategia del partido morado de apoyo parlamentario y expresó su convencimiento de que continuará en lo que resta de legislatura.
«Por encima de los intereses de todos los partidos, nos debemos al interés general de los ciudadanos», dijo en su comparecencia semanal después de la reunión del Consell de Govern. Y añadió: «Estas cosas, que son muy serias, no pueden estar en un continuo debate o cambio según las estrategias internas, muy legítimas, de cada partido».
El debate de la Comunitat
El ‘nuevo' Podemos se resiste a interpretar las declaraciones de Costa como una desautorización. Desde lo que se va perfilando como nuevo núcleo del poder político en Podemos se insistió en que la decisión de entrar en el Govern no tiene que concretarse ya, que las bases son las que tendrán la última palabra, que la política es volátil y nunca «hay que cerrar ninguna puerta» y que lo relevante es que se ha desencallado la negativa a plantear una consulta que, de acuerdo a estas fuentes, se habría producido si Laura Camargo, y no Mae de la Concha, fuera ahora secretaria general.
A los grupos que ahora forman el Govern, PSIB y Més, lo que de verdad les preocupa (más que el debate interno de Podemos sobre si solicitar o no la entrada en el Ejecutivo y en qué momento) es quién llevará, por parte del partido morado, el día a día de las negociaciones para pactar las leyes que se llevan al Parlament y la estrategia parlamentaria en general. La actual portavoz, Laura Camargo, tiene asumido que la continuidad en este puesto es una decisión del Consejo Ciudadano Autonómico elegido en las primarias y en el que su grupo, Construint Podem, obtuvo 12 asientos frente a los 21 de Amb Totes Podem (el que encabezaba Mae de la Concha) y a uno de Som Bases. Tampoco ignora que después del congreso estatal de Vistalegre II (del que surgió el Consejo Ciudadano Estatal), Iñigo Errejón fue apartado de la portavocía tras pugnar con Pablo Iglesias por la secretaría general.
Claves
1-La mitad del grupo parlamentario participa en el Consejo Ciudadano
Laura Camargo, Baltasar Picornell, aitor Morrás y Marta Maicas dejarán oír su voz en el Consejo Ciudadano Autonómico. Son la mitad del grupo parlamentario. Eso augura divergencias de planteamiento con el núcleo de la dirección que Mae de la Concha quiere evitar dialogando.
2- Alejandro López, un ‘errejonista', seguirá al frente de la organización
Alejandro López, que apoyó a Errejón en las primarias estatales, seguirá al frente de la secretaría de Organización. Conocedores de los entresijos del partido destacan su papel relevante le sitúan como auténtico estratega del nuevo periodo que se inicia ahora.
3-Ribot será la voz insular y el ‘argumentario' cambiará de menos
Mae de la Concha dará más peso a las Islas después de que la dirección estatal suprimiera los consejos insulares del partido. Aurora Ribot, será la voz del partido en Mallorca. El ‘camarguista' Adrián Martínez Pacín será relevado como responsable del argumentario para los medios.