El grupo Podemos–Guanyem presentará una moción en el próximo pleno del Consell d'Eivissa instando al Govern balear a que llegue a un acuerdo con los medios de comunicación del archipiélago balear para suprimir contenidos sexistas o discriminatorios. «De lo que se trata es que dinero público no vaya a parar a medios de comunicación que publiciten anuncios sexistas», apuntó ayer la portavoz del grupo y vicepresidenta primera del Consell d'Eivissa, Viviana de Sans.
En caso de que este acuerdo no fuera posible, desde Podemos–Guanyem proponen que se modifique la Ley balear de Publicidad Institucional (Ley 13/2010, de 9 de diciembre) para que a la hora de elegir los medios o soportes para las campañas de publicidad o comunicación institucional «se excluya a los medios que publiquen o difundan contenidos sexistas, discriminatorios o que inciten a comportamientos contrarios al orden jurídico», explicaron en una nota facilitada a los medios.
En el tercer punto de la moción también se exige al Govern balear que dote explícitamente al Consell Audiovisual de Balears y al Observatori per a la Igualtat, de las funciones necesarias para determinar la aptitud de los medios para recibir campañas de publicidad institucional «para que ellos sean los garantes y juzguen qué publicidad es sexista y tengan la potestad de hacer dictámenes para excluir a determinados medios de comunicación que incumplan la Ley», apuntó Viviana de Sans.
Tanto la ley estatal como la autonómica de publicidad institucional establecen que las instituciones públicas tienen prohibido expresamente hacer campañas publicitarias o de comunicación con contenidos discriminatorios, sexistas, o que inciten a comportamientos contrarios al ordenamiento jurídico.
«Cuando las mismas instituciones y los medios públicos están obligados a evitar todo contenido discriminatorio y sexista, además de tener que hacer campañas en contra de estas lacras y de la violencia machista, parece de sentido común que este criterio sea también de aplicación de forma excluyente, a la hora de recibir publicidad institucional, a los medios de comunicación privados que publiquen o difundan contenidos de este tipo», apuntaron desde Podem–Guanyem. Además, añadieron que los anuncios de prostitución «fomentan una actividad ilegal y la economía sumergida» y que «enriquecer a mafias despiadadas que utilizan a personas como esclavas sexuales víctimas de la trata, utilizando además métodos coercitivos inhumanos como el secuestro, el chantaje, las amenazas o la violencia física o psicológica».
LA NOTA
Apoyo a la decisión de suprimir los anuncios de sexo del Periódico
El pasado mes de noviembre el Grupo Prensa Pitiusa, editor de este periódico, decidió dejar de publicar anuncios de sexo en sus medios. La decisión de este grupo de comunicación fue alabada desde todos los sectores de la sociedad. De hecho, el Consejo de Estado, el órgano consultivo supremo del Gobierno, ya avaló la prohibición de los anuncios relacionados con la prostitución en la prensa escrita en un informe de marzo de 2011 después del encargo que le realizó el Ministerio de Igualdad sobre las posibilidades de actuación contra anuncios de contenido sexual. No obstante, el estudio del Consejo de Estado constató que la autorregulación por parte de los medios de comunicación como instrumento para prohibir la publicidad de la prostitución ha sido insuficiente ya que entonces sólo tres medios (La Razón, Público y Avui) habían suprimido los anuncios de contacto de sus páginas.