Los cuatro detenidos por el robo de 400.000 euros de la caja fuerte de un hotel de Formentera fueron condenados ayer a penas de dos años de cárcel tras aceptar el acuerdo de conformidad alcanzado entre la partes, un acuerdo que recogía la puesta en libertad de los acusados ya que la pena quedó suspendida durante cinco años.
El juicio se celebró ayer en el juzgado de lo Penal número 1 de Ibiza con la presencia en sala de los dos detenidos en Ibiza, mientras que la pareja arrestada en Madrid lo hizo por videoconferencia desde los penales de Alcalá y Valdemoro.
Los cuatro acusados, de nacionalidad rumana y que se encontraban en prisión provisional desde su detención en noviembre, reconocieron los hechos y aceptaron la condena penal. La jueza dejó visto para sentencia la parte de la responsabilidad civil.
Los acusados fueron detenidos por los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Ibiza que investigaban el robo de la caja fuerte cometido con el método del ‘oxicorte' la madrugada del 29 de noviembre.
El propietario del complejo hotelero reclama un total de 47.069 euros. Según la denuncia, en la caja fuerte habían 400.000 euros y en el momento de la detención se recuperaron 359.915 euros. La víctima del robo señaló que le faltan esos 41.000 euros y reclamó otros 6.000 más por los gastos en la reposición de una caja fuerte, así como los gastos derivados de un préstamo que tuvo que solicitar ya que, según advirtió ante el tribunal, «tenía todo ese dinero en la caja porque no tenía deudas pendientes e iba a abonar las nóminas de los trabajadores pero con el golpe me dejaron limpio».
Cazados con el dinero
Los cuatro acusados fueron detenidos en el marco de la ‘Operación Cosfabi' de la Guardia Civil, que se cobró las primeras piezas el 1 de noviembre en Ibiza con las detenciones de dos hermanos V.C. y N.C., cuando se disponían a abandonar la isla de Ibiza por vía marítima con un vehículo. En el posterior registro de sus pertenencias se hallaron 178.045'92 euros de los sustraídos en Formentera. Para perpetrar el robo habían contado con la colaboración de la acusada, que había trabajado en el complejo hotelero.
Los agentes de la Policía Judicial de Ibiza averiguaron que uno de los implicados había abandonado la isla justo después de cometer el robo, por lo que los guardias civiles se desplazaron a Madrid, lugar donde se hallaba el sospechoso. Con el apoyo de miembros de la Guardia Civil de Valdemoro detuvieron a C.P. En el registro domiciliario practicado en su vivienda de la localidad de San Martín de la Vega los agentes encontraron 181.870 euros.