Unas veinte personas, entre ellas varios políticos del Partido Popular, PSOE y Podemos, se manifestaron ayer en el Paseo Vara de Rey de Ibiza para informar sobre la situación en la que se encuentra actualmente el Hospital Residencia de Cas Serres. Lo hicieron aprovechando el tirón de la última mañana de la feria Eivissa Medieval y con sus camisetas blancas, sus pegatinas con el logotipo de la H roja en el centro y con dos pancartas en las que se podía leer «Hospital Siempre Cas Serres» y «La sanidad se defiende».
«Queríamos hacer una manifestación con un recorrido establecido pero hemos decidido cambiarlo por una acción informativa ya que nos hemos dado cuenta que la mayoría de los ciudadanos no sabe el servicio que prestamos en Cas Serres», expresó ayer Juan Luis Nuñez, presidente del comité de empresa. Un servicio que, según sus palabras, «con médicos durante 24 horas, cuidados a crónicos o enfermería, quita mucho trabajo al hospital de Can Misses y es el mínimo que se tendría que dar en todas las residencias»
Por otro lado, Nuñez valoró «muy positivamente» la representación política en el acto. Por Vara de Rey se dejaron caer los populares Pilar Marí, Vicent Roig, Santi Marí o José Vicente Marí Bosó, del PSOE como la consellera Marta Díaz y algunos representantes de Podemos como la vicepresidenta primera del Consell d'Eivissa, Viviana de Sans, y el diputado autonómico Aitor Morrás. «El que estén aquí es positivo porque por fin parece que hemos conseguido que se pongan todos de acuerdo, sin importar su color, sobre lo que representa Cas Serres para la ciudadanía ibicenca y lo necesario que es la licencia de hospital».
En este sentido, el presidente del Comité de Empresa reconoció que este cambio de actitud «no hubiera sido posible sin la presión de la ciudadanía y sin el trabajo que han llevado a cabo desde el primer día los familiares de los usuarios de Cas Serres». Y confirmó que actualmente ya hay unas tres mil personas inscritas en la plataforma, «un auténtica barbaridad».
«Está todo bastante encauzado»
Mientras, Susana Cros, portavoz de los trabajadores del Hospital Residencia Asistida de Cas Serres, también se mostró optimista con la situación actual aunque recalcó «que esto todavía no ha terminado en absoluto».
Aseguró que «está bastante encauzado» pero que aún faltan negociar bastantes aspectos «como el convenio, el tema de las camas o el aumento de la plantilla del centro». Además, confirmó que actualmente se está trabajando en el tema legal «para buscar las fórmulas necesarias para que las mociones preparadas por los distintos grupos políticos puedan llegar a buen término y para que el servicio de Cas Seres se garantice con el tiempo». Igualmente, explicó que se sigue trabajando para que el Consell d'Eivissa se haga con toda las competencias de Cas Serres «y así que en un futuro no haya problemas con asuntos como el de la contratación de trabajadores».
Por ello, la portavoz no quiso hablar de plazos concretos para ver el conflicto solucionado definitivamente asegurando «que aún queda mucho trabajo por delante». A pesar de ello, los trabajadores tienen confianza en que «las proporciones de ley se aprueben antes del verano» y que «con un poco de suerte antes de las elecciones estará ya todo zanjado».
Por último, Cros aseguró «que la semana que viene está prevista la visita de los miembros de la Dirección general de acreditación desde Palma para analizar todas las infraestructuras del centro y así seguir dando pasos hacia el final del problema».