El PSOE en el Consell d'Eivissa aseguró ayer que la no aprobación de la propuesta de zonificación turística que el viernes se debate en pleno provocará el efecto contrario al que pretende Guanyem, que ya ha anunciado que no apoyará la propuesta de delimitación provisional de las zonas aptas para la comercialización de estancias turísticas en viviendas de uso residencial.
Según recordaron los socialistas en un comunicado, el 1 de agosto acaba la moratoria de un año en la concesión de licencias de alquiler turístico en viviendas y, desde entonces, si no se ha aprobado de forma definitiva la propuesta de zonificación planteada, dichas licencias podrán pedirse en todos los municipios.
El PSOE destacó que la Comisión de Ordenación Turística del Consell ya ha fijado el techo de plazas turísticas en viviendas, de manera que «en ningún caso» podrá haber un incremento por encima de las existentes. Para autorizar nuevas plazas, según explicaron, los interesados deberán adquirirlas en la bolsa de plazas de viviendas turísticas –que en la actualidad está vacía– formada por las que se den de baja.
Así, el PSOE reiteró que la «supuesta» prohibición en el conjunto de Ibiza de la actividad, «además de tratarse de una medida de dudosa legalidad, no provocaría el cese de las actividades ya autorizadas, que pueden seguir operando de acuerdo con la ley».
La reforma de la Ley Turística blinda además los espacios protegidos, donde no se podrán autorizar nuevas actividades de alquiler turístico, como el Parque Natural de Ses Salines y terrenos rústicos con figuras de protección.
Pacto de gobierno
Los socialistas también recordaron que el acuerdo firmado entre Vicent Torres y la vicepresidenta primera, Viviana de Sans, en representación de PSOE y Podem–Guanyem, respectivamente, a principio de legislatura establecía en este asunto «no autorizar los alquileres turísticos en edificios plurifamiliares en el conjunto de la isla de Ibiza mientra no se resuelta esta situación excepcional», por lo que los socialistas confían en que Guanyem actuará «con responsabilidad» y cumplirá los acuerdos firmados y votará a favor de la propuesta de zonificación.
Por otra parte, el Partido Popular calificó como «vergonzoso» que Guanyem rechace ahora el alquiler turístico en viviendas unifamiliares y haya anunciado que en el pleno del Consell votará en contra de la propuesta que permitiría esta actividad en determinados municipios.
En declaraciones a Europa Press, el conseller Vicent Roig criticó que un partido «cómplice» en la legalización de las estancias turísticas en plurifamiliares «ahora venga con estas cosas», cuando ha votado a favor de una normativa que es una «barbaridad» y que «ha dado la vuelta al mundo del turismo en la isla». «Ellos sabrán la responsabilidad que tienen en esto», añadió.
Según el conseller, es también «vergonzoso» que un partido que forma parte de un equipo de gobierno esté esperando que un grupo en la oposición «salve» a sus «compañeros de viaje». «Que hablen y decidan lo que quieren hacer», ha dicho.
El conseller criticó también que este martes hayan recibido la documentación, «cuando quedan dos días para el pleno y es un tema de gran sensibilidad, que hay que mirar muy bien y decidir muy bien, porque no sólo se habla de turismo, sino también de urbanismo».
Roig reiteró que es «vergonzoso» que una normativa turística incida en los ámbitos urbanísticos de los ayuntamientos. «Es un expediente complicado, sensible, que perjudica o beneficia a distintas zonas y hay que mirarlo con lupa y verlo con tranquilidad», explicó Roig, recordando que el PP aún no ha avanzado en qué sentido irá su votación.
El conseller no ha descartado que la postura de Guanyem provoque una crisis con sus socios de gobierno. «Cuándo no ha habido crisis», se cuestionó, ya que «se asiste siempre a diferentes llamadas de atención».
«Se ha visto con Cas Serres, que Podemos aquí vota y dice una cosa y después se les desautoriza desde Podemos Baleares. En relación a la escoleta de Can Nebot, este martes se ha visto otro episodio: en enero Podemos en Ibiza vota en contra de traspasar el centro al Govern y resulta que el conseller de Educación, de Guanyem por cierto, se marcha todo flamante al Parlament para asistir a la votación de una moción de Podemos para pedir que el Govern se responsabilice de la escoleta. No tiene ni pies ni cabeza. Es vergonzoso y esta gente no tiene ni el más mínimo sentido de lo que es una administración y de lo que es trabajar. No saben dónde están, aunque para cobrar a final de mes lo tienen muy claro», concluyó.