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Denunciados cinco jóvenes sorprendidos de «fiesta»en el interior del yate calcinado

Imagen de las dos embarcaciones llenas de grafitis.

| Eivissa |

La Policía Local de Sant Antoni denunció ayer, a primera hora de la mañana, a cinco jóvenes que se encontraban de «fiesta» en el interior del ‘Harmonya', el yate calcinado el lunes en la playa de Es Caló des Moro.

Fueron los vecinos de la zona donde están varadas las dos embarcaciones quemadas quienes avisaron a los agentes policiales al escuchar música en la plataforma de la playa.
Al acercarse pudieron comprobar que no solo había música fuera de la playa, sino también en el interior del yate. Fue entonces cuando la Policía Local interpuso las denuncias correspondientes por romper el precinto policial de seguridad que rodea a las embarcaciones y por estar en posesión de un altavoz de música que sonaba a «alto» volumen; cuatro denuncias fueron a residentes españoles y una a un turista británico.

Por otra parte, el ‘Harmonya' volvió a ser víctima de nuevas pintadas y amaneció con todo el lateral lleno de grafitis al igual que a embarcación pequeña que también fue pasto de las llamas.

La playa de Es Caló des Moro continúa cerrada desde el lunes alrededor de las 07.30 horas aunque, según ha podido saber este medio, se espera que «por poco tiempo».

Capitanía Marítima remitió un requerimiento al armador para que a la «mayor brevedad» retirara las embarcaciones. «Ahora se está pendiente de que se presente el plan de actuación por parte de la empresa que el armador ha contratado, que tiene que ser aprobado por Capitanía, y ponerse en acción en cuanto se pueda».

Emergencias también recordó que la «fase de emergencia» finalizó el martes y «ahora tenemos puesta la malla de contención que estará allí hasta que quiten los barcos».
Los accesos a la playa siguen cortados y se ha señalizado, en diferentes puntos, la prohibición de paso a la playa. A esto se suma la vigilancia continua en la zona costera afectada por parte de los socorristas y de la Policía Local del municipio.

Por su parte, los establecimientos que se encuentran en Es Caló del Moro acusan «grandes» pérdidas económicas con motivo del cierre de la playa. «Nos afecta mucho a todos. Durante el día no hay nadie. He hablado con Medi Ambient y me han dicho que están haciendo lo que pueden con el Govern balear y con Capitanía Marítima», matizaron desde uno de ellos.

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