La Conselleria de Medi Ambient del Govern balear no quiere, por el momento, pronunciarse sobre si seguirá el mismo método de matar a tiros a las cabras supervivientes de la matanza de es Vedrà de 2016. Ese año, la población caprina del islote fue abatida a tiros, pero sobrevivieron varios ejemplares que se han reproducido en estos últimos años. Según expertos de la empresa Tragsatec y del departamento de Biología de la UIB, que visitaron el islote este pasado mes de mayo para elaborar unos informes para la Conselleria de Medi Ambient del Govern sobre la situación in situ, la población de cabras supervivientes ha crecido en el último año y ya se pueden contar 16 ejemplares entre hembras, machos y cabritos, lo que ha llevado a un empeoramiento del estado de la flora endémica del islote, según constatan estos expertos en dos informes.
La abogacía de la Comunidad Autonóma remitió el mes pasado un escrito al Juzgado de Instrucción número 1 de Ibiza, donde se encuentra judicializada la matanza de es Vedrà desde que la asociación ASSAIB denunciara los hechos en 2016, pidiendo autorización para que Medi Ambient «realice las actuaciones necesarias para finalizar la erradicación de las cabras existentes en es Vedrà, así como la eliminación de las infraestructuras ganaderas no autorizadas» y señalan en el escrito que «resulta necesario retomar de manera urgente las tareas para la erradicación de las cabras de es Vedrá» visto el ritmo de reproducción de los animales.
Reacciones
Sobre si esta vez se seguirá el método de matar a tiros a las cabras de es Vedrà, un portavoz de la Conselleria de Medi Ambient del Govern no quiso entrar en detalles y precisó ayer que cuando el Juzgado de Instrucción número 1 de Ibiza responda a la petición «se valorará cómo hacerlo».
Desde el Consell d'Eivissa no quisieron ayer hacer valoraciones sobre si se debería seguir la misma fórmula de matar a tiros a las cabras supervivientes o si se podría buscar una alternativa para sacarlas con vida. Desde Guanyem tampoco quisieron profundizar en detalles, pero apuntaron que son «los técnicos los que deben aconsejar cuáles son los pasos a seguir para mantener la riqueza natural de un islote tan frágil como es Vedrà y suprimir las amenazas que lo ponen en peligro».
Por su parte, Podem Eivissa ya manifestó su «rechazo frontal» a que el Govern «vuelva a utilizar los métodos violentos y crueles» de 2016. «Esa actuación cruel y chapucera, perpetrada con nocturnidad y opacidad, además de demostrarse fallida –ya que ni siquiera logró su objetivo de eliminar las cabras– suscitó una profunda conmoción y rechazo por parte de la sociedad ibicenca, y no puede volverse a repetir», apuntó Podemos. En este sentido, exigió a la Conselleria de Medi Ambient que «aprenda de los errores del pasado y que que prepare un plan para sacar las cabras supervivientes de es Vedrà en buen estado y las entregue en adopción a las asociaciones animalistas, a las protectoras o a los particulares que ya se ofrecieron para acogerlas».
El exconseller de Medi Ambient de Ibiza, Miquel Vericad, manifestó su profundo malestar con el comunicado que emitió Podemos este fin de semana y aseguró en su perfil de Twitter que se trataba de un comunicado «lleno de falsedades, con el agravamiento que conocen de primera mano las razones científicas y técnicas».
Los animalistas
Tras conocer que las cabras se han reproducido, los animalistas mostraron su satisfacción ya que las cabras supervivientes han criado mientras el proceso judicial está abierto. Desde que denunciaron la matanza de es Vedrà en el año 2016, el Govern no puede actuar en el islote. «Nuestra idea era que el procedimiento durara lo máximo posible y las cabras se volvieran a reproducir», explicó Víctor Valladares, abogado de ASSAIB.