Lo anunció ayer a bombo y platillo al concluir el desfile el presentador Manel Fuentes: «Natural Adlib es mucho más que moda». Y no le falta ni un ápice de razón. Fundamentalmente porque el desfile que protagonizaron ayer por la tarde en el Recinto Ferial las firmas Monika Maxim, K de Kose-Kose, Trindades Ibiza, La Brisa Ibiza, Estrivancus, Ángela Martí, Belén Bohem, Tanit Jeans y Etikology fue una oda al respeto al medio ambiente que comenzó con prendas artesanales, ergonómicas, sostenibles y ecológicas y terminó con una pequeña perfomance en la que la modelo Godeliv Van den Brandt se quitó plásticos de su cuerpo y lució un vestido con una capa en la que se podía leer el mensaje ‘Plásticos No'. Todo ello al ritmo de la música y los versos creados para la ocasión por el poeta ibicenco Ben Clark.
Por lo demás, el desfile fue una continua montaña rusa de emociones, colores, diseños, músicas y propuestas para todos los gustos. Ante un recinto ferial que presentaba más de media entrada, Manel Fuentes volvió a demostrar que es una magnífica elección por parte de la organización. Él se mostró encantado e incluso, peloteó a la vicepresidenta segunda del Consell d'Eivissa, Marta Díaz, «porque yo, al igual que Cayetana, quiero estar presentando esta pasarela todos los años». Además, Fuentes tuvo tiempo para ironizar con lo sucedido el año pasado cuando se fue la luz. «Fíjense si es ecológico y sostenible Natural Adlib que el año pasado lo hicimos sin luz, sin música, conmigo a gritos y con sus aplausos, y todo salió genial».
Mucho recuerdo a la tradición pitiusa
En muchas de las colecciones presentadas por los nueve diseñadores se mostró una clara influencia de la tradición pitiusa. Tanto que lo primero que se vio sobre la pasarela ayer fueron los trajes blancos con toques azules y amarillos, las cintas de pagesa y los senallons creados por Catalina Bonet, fuera del programa y al ritmo de cuatro sonadors.
Ella se llevó la primera ovación de la tarde. No fue la única. Mireia Canalda, una de las grandes protagonistas de esta pasarela junto a la modelo de la República del Congo, Godeliv Van den Brandt, y la ibicenca Emma Torres, abrió la colección Alma de Monika Maxim con un precioso vestido de tirantes. Fue el inicio de una serie de prendas elaboradas con patrones sencillos y transparencias elaborados en algodón s y colores claros. Además, destacaron dos modelos para hombre completamente blancos y muy elegantes, uno de ellos vestido por Krys Pasiecznik.
Tras la relativa calma y un Adlib quizá más puro, llegó la revolución sobre la pasarela. Como es habitual Ariadna Ferrer, creadora de la marca K de Kose-Kose no dejó indiferente a nadie con sus propuestas y se llevó una gran ovación. Innovadoras y arriesgada su colección Llamando a los ídolos mutantes fue ciertamente incalificable para muchos espectadores, pero destacó por la perfección de sus formas y la elaboración de las prendas.
Con ciertas reminiscencias militares, apostó por cuadros escoceses, tejidos bordados, el cuero, el filtro o las tachuelas para presentar prendas en negro con tocados, sombreros y complementos realmente sorprendentes y casi imposibles de llevar.
La tercera en mostrar sus prendas sobre la pasarela fue Trinidad Aguilar, creadora de la firma Trindades Ibiza. Después de su debut el año pasado en esta misma Natural Adlib, en esta ocasión presentó una colección que bautizó con el nombre de Herencia. Al ritmo de las castanyoles y una flaüta presentó trajes con colores blancos, negros, marrones o dorados clara inspiración pagesa pero que a través de sus transparencias y sus materiales como la seda, el tencel, el raso, el terciopelo, el rayón o el algodón, conectaban directamente con la sexualidad y la sensualidad de la mujer. Y el del hombre también puesto que Krys Pasiecznik vistió uno con un pequeño tanga que levantó más de un suspiro entre la concurrencia.
Tras ello, la firma Brisa Ibiza presentó su colección titulada Suculentas, inspirada en esta planta del mismo nombre que crece en la isla de Ibiza. Elaborada con prendas cien por cien sostenibles, fibras vegetales y en colores tirrea, caquis, grises, blancos o verdes, elaborados con tintes naturales con certificado GOTS (Normas Textiles Orgánicas Globales). Fue una colección que se caracterizó por la comodidad, naturalidad y la sencillez de las formas.
Belen Boheme volvió a trasladar al público al Adlib más tradicional con piezas blancas, azules, beige o turquesas, elaboradas en materias como el lino o el algodón para novias y acompañantes elegantes y sencillas. Lo hizo con su colección Campesina, inspirada directamente en los campos, caminos y zonas más rurales de nuestra isla, y en la que empleó las materias primas en bruto más tradicionales de Ibiza, como rafia, paja o yute para tocados, bolsos y sombreros.
Tanit Jeans Ibiza, de la diseñadora Verónica Buehler, no defraudó y fue fiel a sí misma y a una trayectoria que le ha convertido en una de las firmas más conocidas en el campo del denim en España. Su colección Rebeldes con causa se pudo ver bajo las tonadas de la canción Imagine de John Lennon y destacó por sorprendentes prendas asimétricas, faldas, tops, cazadoras o pantalones de distinto tamaño. Todo ello combinado con distintos colores más allá del clásico de los jeans.
Finalmente, el desfile lo cerró la colección My inner garden de Etikology Ibiza. Una de las grandes defensoras en nuestra isla de la moda sostenible y la filosofía slow fashion mostró vestidos de fiesta en colores naturales con estampados realizados artesanalmente con tintes naturales de plantas y flores de la isla, con espaldas desnudas y sobre todo cómodos y favorecedores.
Firmas de complementos
En esta nueva edición de Natural Adlib también se pudieron ver las colecciones de dos firmas de complementos: Estrivancus y Angela Martí.
La primera de ellas, creada en 2016 por la artesana María Morcillo, es especialista en espardenyes con sello propio y eso quedó claro en lo que se pudo ver en su debut en Natural Adlib. Bajo el nombre de Ibicencas, mostró calzado realizado a mano con la fibra de las hojas de pitra o agave con toques de color obtenidos a través de pigmentos naturales como el ocre, el verde oliva, el marrón o el añil.
Mientras, la también artesana Angela Martí, en este caso del cuero, presentó la colección junto a Delbes Ibiza la colección A flor de pell. En ella, se pudieron ver bolsos de distintos tamaños, con herencia de los grandes capazos y los sacos que se usan en el campo, y algunos accesorios como cinturones, tintados a mano, hechos con pieles exóticas y de becerro y cosidos con hilo encerado para asegurar su resistencia.