El Colegio de Abogados celebró ayer en Ibiza el acto institucional organizado con motivo de la fiesta colegial en un año «sin muchos motivos para la celebración», según advirtió el decano de la institución, Martín Aleñar, quien no obstante remarcó que de entre las adversidades surge un motivo de celebración y ahí puso en valor «el trabajo y la lucha titánica de los abogados de las Pitiusas para superar esta contingencia», en referencia a la caótica situación de la Justicia en las Pitiusas tras el incendio de los Juzgados.
El discurso del decano de la institución colegial puso el cierre a un acto en el que reivindicó la labor de los abogados durante este «duro año» marcado por el incendio que el 21 de enero dejó inoperativos los juzgados de Isidor Macabich. En el relato de Aleñar hubo momentos emotivos con palabras para el recordado Félix Marí -fallecido el pasado año-. También hubo pasajes para el agradecimiento para el juez decano de Ibiza, Juan Carlos Torres, y el comisario jefe de Ibiza, Manuel Hernández, «por su apoyo y colaboración en unos meses complejos. Muchas gracias por el apoyo, propuestas y atención en todo momento», recalcó dirigiéndose a los aludidos. Y también hubo espacio para un mensaje crítico dirigido al Ministerio de Justicia y al presidente del Gobierno ya que, según advirtió, «a quienes nos gobiernan trasladamos nuestras inquietudes y nuestras cartas no merecieron ni el acuse de recibo», lamentó.
Reivindicación de la abogacía
El decano del ICAIB advirtió que la demora en la llegada de los nuevos juzgados supondrá que habrá «que continuar trabajando a destajo, pero ya habéis demostrado que sois capaces de sacarlo adelante», remarcó Aleñar, quien destacó el papel del turno de oficio y la colaboración del juez decano y del comisario para superar episodios como la llegada de pateras.
La situación actual también ocupó parte de los discursos de los intervenientes. Aleñar lamentó que hoy en día se pone en peligro la presunción de inocencia. «Todo el mundo tiene derecho a defensa y reclamamos una Ley Orgánica del derecho de defensa, muy necesaria, porque hay que reforzar el secreto profesional y la presunción de inocencia», argumentó.
Previamente los asistentes habían escuchado las palabras de Julián Aguilar, uno de los cinco letrados distinguidos por sus 25 años en el Colegio. Aguilar puso en valor la importancia de la negociación y así se lo transmitió a los cuatro nuevos colegiados. «La abogacía es una profesión muy buena y muy digna. Es un privilegio porque individualmente podéis resolver los problemas y hacer un traje a medida, una solución antes de ir a juicio», advirtió Aguilar, quien reivindicó el acuerdo entre partes. «Es muy fácil poner una demanda y que resuelva un juez. En estos tiempos de enfrentamientos yo reivindico el acuerdo entre partes», subrayó Aguilar, quien lamentó el afloramiento de «radicalismos que pensábamos ya enterrados, los casos de xenofobia o homofobia, o unos datos de violencia sobre la mujer insostenibles para cualquier sociedad».
Julián Aguilar había recogido previamente el diploma y la insignia del Colegio en reconocimiento a sus 25 años en la institución, una distinción de plata que también recibieron Agustín Goerlich López, Pedro Guasch Cañas, Cristina Molina Costa, Bartolomé Riera Ramón y Nuria Riudavets Borrás.
Previamente había sido el turno de la jura e imposición de toga para cuatro nuevos colegiados. «Después de muchos años llega este momento que es un premio al esfuerzo», señaló Patricia Castelló Tur junto a Alessandro Melis, quien añadió que la situación actual «es muy complicada, pero también es un reto». Junto a ellos recibieron la toga Miguel Álamo Portillo y Víctor Alcaide Costa.
El reconococimiento a la totalidad del turno de oficio se personalizó este año en las figuras de Cristina Tur Sanz y Félix Salvador Marí de la Paz.
El acto contó con la asistencia del presidente del Consell, Vicent Marí, el juez decano de Ibiza, Juan Carlos Torres, la fiscal jefe de Ibiza, Mamen Navarro, la secretaria coordinadora del TSJIB, Josefa Juan Marí, y el comisario jefe, Manuel Hernández.
El ICAIB, además, entregó un cheque solidario de 2.000 euros para Cáritas Ibiza.