El pleno del Ayuntamiento de Sant Antoni dio luz verde al proyecto del equipo municipal que encabeza Marcos Serra, para paliar los efectos de la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, cuyo valor asciende a un total de 1,3 millones de euros con diferentes medidas de ámbito fiscal, social y económico.
El pleno de ayer fue inusual debido a que solo asistieron de manera presencial un representante de cada formación política y el resto de concejales lo tuvieron que seguir por vía telemática.
En materia fiscal, las propuestas consistían en el aplazamiento del pago de tasas e impuestos durante ocho meses sin intereses, la destinación de 250.000 euros a subvenciones para que pymes y autónomos, que hayan tenido que paralizar su actividad, puedan pagar el IBI, el impuesto de basuras o el alquiler de locales y la eliminación de la tasa de ocupación de la vía pública y de la tasa de mercados y mercadillos; entre otras.
A nivel social se destinará el 20 % del remanente acumulado para que la plantilla de Servicios Sociales contrate a tres trabajadores sociales y un administrativo, ayudas al alquiler y el pago de recibos de agua y luz, el aumento de cupones de alimentos básicos, la apertura de una línea telefónica de atención ciudadana o la compra de 20.000 mascarillas.
Por último, en el ámbito económico se permitirán las obras del 1 de mayo al 15 de octubre en el casco urbano y las zonas que afecten a las instalaciones turísticas pero se podrán “establecer restricciones que se estimen adecuadas en cada caso concreto, para evitar molestias por la ejecución de las obras a actividades turísticas abiertas”, según informaron en un comunicado desde el Ayuntamiento. Además también se agilizará el pago a proveedores.
La oposición se abstuvo en dos de los de las propuestas del equipo de gobierno municipal, por un lado de la que se exime del pago de tasas por la ocupación de la vía pública y en la referente a las tasas de mercados y mercadillos.
Por último, el Ayuntamiento pedirá a Costas que se exima del pago de las concesiones de playas y amarres, a Puertos que haga lo mismo con los amarres de las empresas de excursiones, al Gobierno Central que libere el 100 % del remanente para poder hacer más inversiones a nivel municipal y al Govern balear que no aumente las tasas de agua y saneamiento.
El pleno, que empezó con un minuto de silencio como señal de duelo y respeto por las víctimas de la COVID-19, también aprobó por unanimidad que los concejales donen una parte de sus sueldos para la lucha contra la enfermedad.